En la investigación priorizada que adelanta la Fiscalía General de la Nación sobre pensiones, en la línea de Riesgo de sobrevivencia, el ente acusador imputó cargos en contra de José Jesús Ramírez Ramírez, por los delitos de enriquecimiento ilícito de particulares y estafa agravada.
La investigación evidenció que el padre del hoy implicado murió el 30 de mayo de 2003 y que el mes siguiente, el imputado continuó cobrando la pensión como si su padre estuviera vivo.
La denuncia que motivó la investigación fue instaurada por Cajanal, que basado en un informe de Contraloría, estableció que al realizar el cruce de nómina de pensionados con fallecidos, había algunas cédulas de ciudadanía en las nóminas de pensionados que figuraban en la base de datos de occisos de la Registraduría Nacional del Estados Civil, y también aparecían cobrando la mesada pensional posterior a su muerte.
Entre las personas fallecidas que se reportan cobrando pensión posterior a su fallecimiento, está el progenitor del hoy imputado, a quien Cajanal —mediante resolución 4944 de 1986— le reconoció la sustitución pensional.
Según la investigación, Ramírez Ramírez habría presentado el certificado de supervivencia desde el mes de julio de 2003, expedido por una notaría de Cali, Valle del Cauca. Con ese documento que habría sido adquirido con papeles falsos, se daba la apariencia de que su padre aún vivía y así se habría apropiado de dineros del Estado.
Igualmente se habría presentado una autorización supuestamente firmada por el señor José Jesús Ramírez Mesa, en la que avalaba a su hijo para que retirara la mesada correspondiente, ya que la edad y estado de salud lo incapacitaban para hacerlo personalmente.
Es así como se efectuó el cobro total de 54 mesadas, desde junio de 2003 hasta noviembre de 2007, por ciento catorce millones doscientos cuarenta mil ochocientos ochenta y cuatro pesos ($114’240.887).