Bangkok, 14 feb- Las bodas colectivas son algunas de las iniciativas para la celebración de San Valentín en Asia, donde esta fiesta del amor y el consumismo ha ido ganando popularidad en los últimos años, aunque no siempre es bien vista por las autoridades.
Uno de los eventos más multitudinarios tuvo lugar en Tailandia, donde más de 800 parejas LGTBI registraron su unión en la joyería de un centro comercial de Bangkok.
Las parejas homosexuales pueden registrar su unión en el país asiático, aunque estos enlaces carecen de validez legal, a la espera de que se apruebe una ley al respecto en el Parlamento.
Las bodas colectivas, en este caso heterosexuales, también fueron el principal acontecimiento en Filipinas, con más de medio centenar de parejas que se casaron de forma simultánea en la localidad de San Juan, dentro de la aglomeración de Manila.
Las 57 parejas formalizaron su enlace acompañadas de sus familiares en una ceremonia civil celebrada en un pabellón deportivo y oficiada por el alcalde de la localidad, Francis Zamora.
En China, donde este año San Valentín se ha solapado con la celebración del Año Nuevo Lunar, el 14 de febrero es un buen día para la venta minorista y la hostelería: algunas cadenas de restaurantes, como Xibei, regalan una rosa a parejas que se besen en la mejilla y tres a las que lo hagan en los labios.
Hay ideas de todo tipo para atraer clientes en esta fiesta del consumismo: otra cadena hostelera, Zuoting Youyuan, obsequia con «una rosa hecha de ternera fresca» a quien gaste 299 yuanes (41 dólares) y exprese afecto a su pareja.
En Japón, San Valentín comienza a notarse o más bien olerse en el ambiente semanas antes, cuando los comercios empiezan a decorarse con corazones y a promocionar chocolates y productos para cocinarlo, pues la práctica más extendida en el país es que las mujeres regalen a los hombres de su alrededor este dulce.
Los destinatarios son no sólo sus parejas, sino sus compañeros de trabajo, jefes, amigos o familiares, en un gesto de agradecimiento, aunque en años recientes son cada vez más las mujeres que están optando por deshacerse de la encorsetada práctica e incluso compran chocolates para ellas mismas.
En Indonesia, el día de los enamorados coincidió con las elecciones generales, pero en algunos lugares del archipiélago se fusionaron ambos eventos con la entrega de bombones, caramelos y otros regalos a los votantes.
El chocolate es también uno de los regalos preferidos en Camboya, aunque el Ministerio de Agricultura ha hecho una campaña para promover «regalos saludables» con una selección de productos locales de alta calidad.
Las autoridades de este país han mostrado una especial preocupación por San Valentín al advertir a los jóvenes que eviten caer en actos «inmorales» y aprovechen la oportunidad para «abandonar la moralidad jemer», según el diario Khmer Times.
En la India, una ONG celebró un evento en la ciudad de Thane, en el estado occidental de Maharashtra, en el que presentó unos 80 animales rescatados, incluidos perros, gatos, burros y hasta un toro, como «novias y novios» para que puedan ser adoptados por amantes de los animales.
«Si bien el 14 de febrero se celebra internacionalmente el día del amor, estamos creando conciencia de que los animales también necesitan nuestro amor» con esta iniciativa, explicó al diario Times of India un portavoz de la organización Ciudadanos para la Protección Animal (CAP, en inglés), Sushank Tomar.
EFE