Pintadas amanecieron este jueves 9 de mayo las paredes del colegio parroquial Nuestra Señora de Chiquinquirá, ubicado en la diagonal 61 con avenida 42, barrio Niquía de Bello, Antioquia.
En los muros se puede observar la sigla de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, AGC o Clan del Golfo, que pintadas con aerosol negro quedaron fijadas en las paredes blancas de las afueras de la institución educativa.
Esto confirma lo que en días anteriores señaló Análisis Urbano sobre el posible ingreso a este municipio de hombres pertenecientes a las AGC, quienes al parecer habrían llegado a apoyar a uno de los grupos en conflicto. La sigla fue pintada en la zona en la que delinquen las bandas Niquía Camacol y el Mesa.
La estrategia del grupo de origen paramilitar, con cuna en el Urabá antioqueño, podría ser la de buscar aliados en Bello, territorio al que hace rato quieren ingresar y que ahora lo podrán hacer, o lo hicieron ya, aprovechando el enfrentamiento entre las bandas anteriormente mencionados.
Es decir, la coyuntura les permitiría incursionar y ahora, una vez adentro, serán ellos quienes pongan las condiciones, porque además, según pudo conocer Análisis Urbano, su táctica es negociar con otros grupos, grandes y pequeños, para consolidar su presencia y así hacerse con el poder de este municipio tan codiciado por estructuras criminales.
La confrontación armada en Bello se desarrolla en las comunas 7 y 8, además afecta la comuna 6, entre la minoría de la organización Pachelly y la alianza de El Mesa y Niquía Camacol. Cabe recordar que en este municipio el número de asesinatos alcanzó la cifra de 52 casos en lo que va de 2019.
La mayoría de la banda Pachelly no participa de la disputa armada, como tampoco lo hacen los Chatas, los Triana, la Oficina del Doce, los Peludos, el Mirador y la Oficina San Pablo, que también hacen presencia en este municipio del norte del Valle de Aburrá.
Es probable que el enfrentamiento se extienda a otros barrios y comunas de Bello, así como a los municipios de Copacabana, Girardota y Barbosa.
Hasta el momento, haciendo un balance frívolo entre ganadores y perdedores, van ganando los grupos ilegales y van perdiendo los ciudadanos de a pie, los buenos bellanitas. En ceros están la Administración Municipal, la Policía Nacional, el Ejército Nacional, la Fiscalía General de la Nación, la Gobernación y el Gobierno Nacional, que ni con el envío del Ministro de Defensa Guillermo Botero pudo acabar con la confrontación armada, que no solo se recrudece, sino que va para largo.