Bagdad, 25 de enero de 2024.- El ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, dijo hoy en Bagdad que se mantendrá la presencia de las tropas españolas en Irak mientras así lo considere el gobierno iraquí, en un momento de tensión regional con numerosos ataques contra la base internacional y en pleno debate sobre la posible salida del país de las fuerzas de la coalición.
«Quiero reafirmar hoy aquí que estamos dispuestos a estar a su lado (de Irak) en esta difícil región. Estamos extremadamente preocupados por el constante ataque contra la base militar internacional», dijo Albares tras apuntar que siguen en el país a petición del Gobierno iraquí y que lo abandonarán cuando éste lo considere oportuno.
El jefe de la diplomacia española hizo estas declaraciones en una rueda de prensa tras su encuentro en Bagdad con su homólogo iraquí, Fuad Hussein, a quien mostró su compromiso por mantener sobre el terreno las tropas españolas desplegadas en Irak en el marco de la coalición internacional de lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Asimismo, mostró su preocupación por el repunte de ataques en las últimas semanas contra la base de la alianza internacional, en medio de una escalada de tensión regional por la guerra de Israel contra el grupo islamista Hamás en la Franja de Gaza que estalló el pasado 7 de octubre.
Precisamente, su visita a Bagdad se produce cuando la continuidad de esa operación liderada por Estados Unidos está en el aire, después de que el Gobierno iraquí formara recientemente un comité para programar la salida de las tropas extranjeras del país a raíz de un bombardeo estadounidense en la capital iraquí.
De hecho, en la jornada de ayer el Parlamento de Irak pidió al Ejecutivo que acelere una resolución aprobada en 2020 para expulsarlas, tras un nuevo ataque perpetrado en la noche del pasado martes contra milicias proiraníes que forman parte de la agrupación progubernamental Multitud Popular, integrada de facto en las Fuerzas Armadas.
En su intervención, mostró también su preocupación por la escalada de violencia en el sur de Líbano, país cuya visita de dos días finalizó ayer y donde se reunió con las principales autoridades para avanzar hacia la desescalada tras considerar «muy difícil» lograr la estabilidad regional sin la participación libanesa, país técnicamente en guerra con Israel desde hace muchos años.
«También vamos a seguir defendiendo la libertad de navegación en el mar Rojo y el fin de los ataques hutíes contra buques comerciales», añadió Albares en referencia a la crisis desatada por la situación humanitaria «insoportable» en Gaza, por lo que pidió un «alto el fuego inmediato».
En esta línea, el ministro de Exteriores iraquí, Fuad Hussein, apreció el papel de España para detener la guerra en Gaza y su compromiso con la seguridad de Irak al formar parte de la coalición internacional que lucha contra el EI.
A lo largo de la jornada, el ministro español se reunirá también con el presidente del país, Abdelatif Rashid, y el primer ministro, Mohamed Shia al Sudani.
EFE
