A esta hora: 4:20 p.m., de hoy 30 de noviembre de 2014, comienza a escucharse el ruido producido por la quema de pólvora, esta locura apenas comienza. Buen momento para seguir recogiendo opiniones de quienes creen que la navidad en Medellín es un estallido de pólvora que produce incalculables daños al medio ambiente, a los animales domésticos y silvestres, a los niños, entre otros.
En el portal Las 2 0rillas, Juan Mosquera, en su columna titulada «La peor noche de Medellín» hace un recorrido sobre lo que ha significado la mal llamada ‘Alborada’ y nos recuerda que no es una tradición sino una mala costumbre
«Aquí no llega la navidad, aquí estalla. En Medellín el comienzo del último mes del año truena como el estruendo del final de todas las cosas. Esto que se vive aquí no es una Noche de Paz como invita el villancico, las detonaciones en la ciudad encuentran, justo por ser un valle entre montañas, la caja de resonancia perfecta para el desasosiego. A esto ahora le llaman La Alborada. Pero no es la alborada del pacífico y otras regiones que reciben con cantos y fiestas el cambio de tiempo religioso, sino una alborada que incluso se roba esa palabra para disfrazar de tradición lo que realmente no es más que una mala costumbre impuesta por los paramilitares y sus bandas asociadas a alias ‘Don Berna’.
También el periódico Q’ Hubo en su edición de hoy 30 de noviembre hace un recuento de la ‘Alborada’ como un espectáculo criminal.
Cabe recordar que en la columna de opinión del columnista del portal Minuto 30, Pablo Jaramillo V. Con ojo crítico, titulada “No a la Alborada, no a la pólvora” invita a reflexionar sobre el significado de la llamada ‘Alborada’ y la necesidad que tiene nuestra sociedad de evolucionar y deje de ser Medellín, la ciudad que año tras año encabeza la cifra de quemados con pólvora.
También AnalisisUrbano.com y la Ong CORPADES han invitado a que no se le siga el juego a la criminalidad y su afán por demostrar el poder, en el artículo «Medellín, ¿Santuario de la Alborada Mafiosa?» plantea que la Alborada Mafiosa es un evento dantesco donde La criminalidad celebra, lo institucional se desvanece y la comunidad se somete.
Finalmente se plantea, ¿Por qué debemos decir no a la Alborada Mafiosa? ya que es ruidosa, violenta y criminal contra todo lo que signifique vida: animales domésticos y silvestres, medio ambiente y ciudadanía en general.
¿Será que la ciudadanía del ‘Medellín Metropolitano’ le da un NO rotundo a la Alborada Mafiosa? Esperemos que si, por el bien de nuestra ciudad. Reiteramos el llamado a la institucionalidad para que emprenda un operativo de control disuasivo en pro de demostrarle a los ciudadanos y a los criminales que en Medellín ,la institucionalidad manda y las estructuras criminales de la Oficina del Valle de Aburrá y los ‘Urabeños’ no cogobiernan.
Mañana sabremos quien en verdad manda en Medellín.
