Antioquia, Colombia, 14 octubre de 2022.- El 27 de junio del año en curso fue un día difícil para muchos habitantes del municipio de Granada, Antioquia, ese día asesinaron un líder social y ambiental, además integrante del Pacto Histórico, Julián David Ochoa, conocido como Kutamba Kizirimbembe (Jugar con Lagartos), este asesinato premeditado ocurrió en el corregimiento de Santa Ana.
Los que conocieron a Kutamba saben que era un luchador, polémico pero constante en la lucha por la defensa del medio ambiente y las libertades individuales, igual creía en el cambio, por eso se le metió duro a la campaña Petro presidente.
Algunos, incluso “supuestos progresistas” trataron de enlodar su memoria, no pudieron la comunidad reconoció que el líder asesinado no era miembro de bandas, solo reivindicaba el derecho a consumir marihuana libremente y a sembrar la mata para uso personal y no enriqueciendo los dueños de las plazas de vicio.
Con la muerte de Julián no terminó el riesgo en muchos lugares del municipio, antes se acrecentó.
El 30 de junio la ONG Corpades y la Agencia de Prensa Análisis Urbano publicaron el artículo, “¿Qué quiere la criminalidad en Santa Ana, corregimiento de Granada, Oriente antioqueño?” en este denunciamos lo que estaba pasando y lo que podría ocurrir en el corto tiempo.
Claridad no nos faltó, voluntad política a la institucionalidad sí, “A manera de alerta, en el municipio de Granada podrían presentarse diferentes acciones violentas contra la población. Para evitarlo, las autoridades locales deberán establecer los planes y las estrategias de prevención necesarias, de no hacerlo, hechos lamentables se repetirán con la fuerza desgarradora que produce la omisión, la impunidad y la cobardía de los armados.
Queda la constancia y cualquier hecho que ocurra en este bello territorio será responsabilidad de las instituciones locales.”.
No hicieron nada para prevenir el riesgo que se cierne sobre la comunidad, los líderes sociales y hasta los firmantes de la paz.
AUMENTÓ LA EXTORSIÓN EN GRANADA
Comerciantes del municipio de Granada denuncian a Análisis Urbano que vienen siendo víctimas de extorsiones y advierten que el municipio pasa por una difícil situación de inseguridad, miedo y zozobra constante por la presencia de sujetos “extraños” algunos de ellos podrían hacer parte de la red de cooperantes coordinada por miembros de la Policía y el Ejército.
Es tan peligroso denunciar en Granada que solo 5 personas se han arriesgado a formalizar su denuncia por estos casos.
Dejamos en claro que no todas las personas que harían parte de la Red de Cooperantes estarían infringiendo la Ley, pero, según testigos, esos grupos de vigilancia tendrían muy poco control por parte de las autoridades, al parecer funcionan como ruedas sueltas, por ejemplo, no puede ser legal que algunos de sus integrantes estén profiriendo amenazas continuamente a quien no acata las ordenes que profieren.
¿Será cierto que hay miembros de la Red de Cooperantes que tendrían contratos con el municipio?
Tener contratos con el municipio de Granada cumpliendo los requisitos de ley no es ilegal, sin embargo, hay serios indicios que algunos de los “ciudadanos vigilantes” están severamente cuestionados por la comunidad que se ve obligada a guardar silencio.
Estas personas presuntamente tienen un comportamiento intimidatorio contra la comunidad y lo más grave es que están como enlaces directos de la comandancia de Ejército y Policía Nacional.
Los constantes señalamientos, estigmatizaciones e intimidaciones de estos personajes contra habitantes del municipio son conocidas por las autoridades municipales policiales, esto no sirve de nada, ya que no les ponen freno a los abusos que cometen abiertamente.
Algunas de las víctimas de estos presuntos “guardianes del orden social”, se han visto obligadas a desplazarse forzadamente debido a que no hay autoridad que atienda esta problemática.
La situación es de extrema gravedad, reiteramos que el asesinato del líder ambiental y político, Julián David Ochoa, no es un hecho aislado, podría estar presentándose el inicio de una campaña de acabar o amedrentar a los “indeseables”, la captura este domingo del presunto asesino del líder ambiental, Carlos Alberto Betancur Jiménez, alias “El Maderero” podría dar luces que la mal llamada “limpieza social” esté en marcha en el municipio de Granada.
El asunto se pone espinoso y cobra más relevancia cuando nos damos cuenta que Carlos Alberto Betancur, El Maderero, sería integrante de la Red de Cooperantes, creada, auspiciada y protegida por Ejército y Policía Nacional.
La peor parte la lleva la comunidad, pues no encuentran un sitio de confianza donde hacer las denuncias, pues el comportamiento irregular de estos “ciudadanos” parece estar naturalizado y podría estar contando con la autorización de miembros oscuros de la fuerza pública.
PANFLETO ANUNCIA LA CONTINUACIÓN DE LA MAL LLAMADA “LIMPÍEZA SOCIAL”
El domingo 9 de octubre fue distribuido por desconocidos, un panfleto en el que son declarados objetivo militar varios jóvenes de la zona.
El panfleto podría ser el preludio de la campaña criminal de “limpieza social”, la comunidad está en alerta ya que conocen la seriedad de estas amenazas, por esta razón varios habitantes se han tenido que desplazar otros, temerosos por la situación, buscan el momento más propicio para salir presurosos.
El panfleto muestra a simple vista como algunos sujetos estarían utilizando las siglas de Los Paisas y la Oficina de Envigado para darle más firmeza a las amenazas para causar terror y sobre todo tratar de volcar hacia otro lado los ojos de la institucionalidad que venga de afuera a ponerse al frente del problema, cabe recordar que la institucionalidad local poco o nada hace para evitar lo que esta pasando.
Es claro que este panfleto fue hecho en el mismo municipio de Granada por personajes que ya están acostumbrados a impulsar la “limpieza social”, no podemos olvidar la historia de sangre y muerte que ya está escrita sobre lo acaecido en Granada.
Según el informe Granada: Memorias de guerra, resistencia y reconstrucción, del Centro Nacional de Memoria Histórica, el conflicto armado dejó en ese municipio por lo menos 460 muertos, 299 desaparecidos y unos 10 mil desplazados, cifras grandes para un municipio pequeño.
EL ORIENTE ANTIOQUEÑO ESTÁ EN RIESGO EXTREMO, INSTITUCIONALIDAD, “NO ESCONDAS LA CABEZA COMO EL AVESTRUZ”
Este año, Corpades y nuestro portal de noticias ha realizado graves denuncias sobre el crecimiento de acciones de control armado en el Oriente Antioqueño.
Hasta el momento solo conocemos que las autoridades han decidido hacerse los que no saben lo que pasa, eso solo sirve para seguir exponiendo la seguridad de la población.
En el contexto local, el municipio de Granada cobra una importancia en los corredores y poderes de grupos armados que se mueven con total libertad por la Autopista Medellín-Bogotá en tres puntos estratégicos entre los municipios de Santuario, Cocorná y San Francisco. El primero ubicado en el sector conocido como la Josefina, el segundo La Piñuela y el tercero El Ocho (Cocorná), por el otro costado, en cercanías por el corregimiento Santa Ana por el Río Calderas en límites con los municipios de San Carlos y San Luis. Estos corredores son usados por grupos armados hacia Guatapé y Peñol.
Esta descripción es solo la continuidad de los corredores que pasan por los cañones del municipio de Sonsón, Carmen de Viboral y se proyectan hacia los territorios aquí descritos.
Otro ejemplo de control armado ilegal es el sector El Ocho del municipio de Cocorná, se encuentra intervenido por la estructura paramilitar y mafiosa de las AGC (El Clan del Golfo no existe), es un lugar que usan de veraneo y reuniones.
El más conocido es el prostíbulo El Chombo, hasta allí son obligadas a llegar las personas que, según estos paramilitares, tienen “cuentas pendientes” con la estructura, muchas de estas terminan asesinadas y posteriormente halladas en lugares diferentes o desaparecidas.
Lo paradójico es que cerca de esta zona hay una base del Ejército Nacional, presuntamente muchos de sus integrantes van a veranear y a reunirse con los ilegales.
El terror y el poder criminal se sigue apoderando del Oriente Antioqueño y el resto del departamento, mientras los pomposos consejos de seguridad que se hacen ya sean en Granada o Bajo Cauca, Norte o Nordeste serán otro canto a la bandera, por eso es urgente que se atiendan las particularidades territoriales desde los lugares afectados no en las reuniones en los escritorios de la capital de Colombia, Bogotá.
A.U.
