Antioquia, Colombia, 15 marzo de 2025.- La violencia sigue golpeando el suroeste de Antioquia. En la vereda Potrerillo, del municipio de Hispania, fueron hallados los cuerpos de dos hombres asesinados a tiros, con las manos atadas. Este doble homicidio se suma a otros hechos recientes que han sembrado miedo en la región y provocado el desplazamiento de familias enteras.
Doble homicidio en Hispania: víctimas halladas con las manos atadas
Las autoridades judiciales informaron que los cuerpos fueron descubiertos cerca de la medianoche del miércoles 13 de marzo por un conductor de camión que alertó a la Policía local. Durante la inspección técnica, a cargo del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía, se encontraron siete vainillas calibre 9 mm y un proyectil. Hasta el momento, las víctimas no han sido identificadas.
Las investigaciones continúan para esclarecer los móviles del crimen e identificar a los responsables.
Terror y desplazamiento en Santa Inés tras incursión armada
Denuncia el medio de comunicación Conexión Sur que la violencia ha generado una ola de desplazamientos en el corregimiento de Santa Inés, municipio de Andes. Hasta el 12 de marzo, entre 35 y 40 personas habrían abandonado el corregimiento por temor a la violencia. Además, varias tiendas, restaurantes y otros negocios han cerrado debido a la inseguridad.
El temor en la comunidad se incrementó desde la incursión armada del viernes 7 de marzo, cuando hombres fuertemente armados, presuntamente del Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), irrumpieron en el centro poblado. En este ataque fue asesinado Didier Andrés Bedoya Agudelo.
Pocos días después, el 10 de marzo, los hermanos Héctor y Alejandro Chaverra Burgos, oriundos de la vereda La Meseta, fueron asesinados en un taller del casco urbano de Andes.
A pesar de la presencia de autoridades civiles y militares el 8 de marzo, la comunidad sigue sin sentirse segura, ya que los grupos armados ilegales continúan operando en la zona.
Otro asesinato en Betania: hallan cadáver con heridas de bala
Informa Conexión Sur que la noche del 8 de marzo, en la vereda La Libia, municipio de Betania, fue hallado el cuerpo sin vida de Diego Alejandro Zuleta, de 28 años, quien residía en esta vereda y trabajaba en el sector agrícola.
Testigos señalaron que, la noche del crimen, Zuleta fue visto en un establecimiento en Andes, donde una persona conocida lo saludó y, sin oponer resistencia, salió del lugar. Horas después, su cadáver apareció en una vía terciaria con varios impactos de bala en la cabeza.
En la escena del crimen se hallaron cuatro vainillas calibre 9 mm. Las autoridades informaron que en la zona operan estructuras criminales como el Ejército Gaitanista de Colombia (EGC) y el grupo Carne Rancia.
La investigación quedó a cargo de la Fiscalía Seccional 112 de Andes y la Policía Judicial UBIC-Andes.
Disputa territorial entre grupos armados agrava la crisis
Las autoridades atribuyen la escalada de violencia en el suroeste de Antioquia a la disputa territorial entre el Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), Los Halcones del Suroeste y bandas locales apoyadas por estructuras armadas organizadas del Valle de Aburrá. Estos grupos buscan el control de los corredores estratégicos para el narcotráfico.
Enfrentamientos recientes han sido reportados en las zonas limítrofes entre Antioquia, Risaralda y Caldas. En Riosucio (Caldas), un hombre armado fue abatido por la Policía el 6 de marzo, en medio de operativos contra estructuras criminales en el área.
Mientras la violencia aumenta y la población huye, la institucionalidad parece no dar respuestas efectivas para frenar la crisis.
A.U.