Desde el ayer 18 de julio, un panfleto bajo el título “Cerriteño Desobediente” circula a través de redes sociales Panfleto en los municipios de Anorí y Campamento.
Según ha podido conocer la Agencia de Prensa Análisis Urbano, es imposible que las zonas donde tienen fuerte control las estructuras “Julio Cesar Vargas” y la “Jorge Iván Arboleda Garcés” de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia sea ocupada por otro grupo distinto a ellos, por lo tanto, podría tratarse de un documento elaborado solo para intimidar a la población a que cumpla con la cuarentena decretada por las autoridades y desviar la atención con respecto a la verdadera presencia armada.
El panfleto parece estar dirigido a las personas que no han cumplido con la cuarentena decretada por las autoridades. Amenazan de muerte a quien se atrevan a quebrantar las medidas y declaran un toque de queda a partir de las 8 pm.
Municipios como Campamento, Angostura, Valdivia, Briceño, y Yarumal, coinciden la llamada vertiente Chorros Blancos, subregión norte del departamento de Antioquia sobre la cual reposa un foco de interés de grupos armados que la usan como corredor para fines de la movilidad de sus tropas, tránsito de armamento, transporte de insumos para procesamiento de sustancias ilícitas.
Por su parte, en Caucasia, Bajo Cauca antioqueño, un panfleto con similares solicitudes fue entregado en físico y por redes sociales a algunos habitantes de este municipio. Este escrito ordena de manera ilegal a los ciudadanos abstenerse de las aglomeraciones sociales en tiendas, supermercados e incluso en funerarias. Supuestamente firmado por alias “Otoniel” de las AGC y alias “Marihuano”, prohíbe la afluencia de personas en lugares frecuentados por habitantes y que por su ubicación, permanecen un poco ocultas de las autoridades. Serán las autoridades las encargadas de analizar la veracidad de este panfleto.
Regresando a la compleja situación del norte de Antioquia, municipios como Yarumal son el puente de la interconexión entre los municipios de Campamento, Angostura y Santa Rosa de Osos para la movilidad hacia la subregión del Nordeste, al Bajo Cauca y la Troncal en va hacia la costa Atlántica del país.
Tomado de Google Earth, municipio de Campamento
En esta zona converge el interés del Ejército de Liberación Nacional ELN con el Frente Héroes-Mártires de Anorí y La Compañía Móvil Anorí, pero también la presencia del Frente 36 de las Disidencias de las Farc quienes han invitado al ELN a sellar una alianza para enfrentar a las AGC en los municipios del Bajo Cauca y el Norte de Antioquia. En Campamento también hay presencia de grupo Pachelly y tiene controlado el tráfico de sustancias psicoactivas en varios municipio esta zona.
En conversaciones con algunos habitantes de la zona, Análisis Urbano ha logrado establecer que uno de los mayores miedos de estas comunidades, es posiblemente, el traslado de las confrontaciones armadas del Bajo Cauca y el Norte de Antioquia a este territorio.
Según algunos habitantes, toda la cordillera de este territorio está dominada por el poder real de las armas de los grupos ilegales. Sumado a todo esto, la posible fuente financiación de las AGC podría estar incentivada por grupos transnacionales para consolidar esta franja del departamento antioqueño.
Las comunidades no pueden explicarse como esa presencia armada ilegal sigue merodeando por zonas urbanas y rurales sin presentarse el obstáculo alguno de las autoridades, por eso se habla de posibles nexos o alianzas que permiten esa movilidad.
Un habitante de este municipio, de quien nos abstenemos de difundir el nombre, menciona que la aparición de este panfleto es un mal menor, sobre todo si se compara con el presentimiento que tiene la comunidad por la latente llegada de la confrontación armada.
Coincidimos en que evidentemente la aparición de un panfleto anónimo como este en una zona fuertemente controlada es un mal menor, será las autoridades las encargadas de investigar y sancionar, mientras esto pasa el escenario pintado por los lugareños merecen toda la atención del Gobierno.
