Luego de valorar el material probatorio y los testimonio recibidos de varios exintegrantes de las extintas autodefensas, un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos impuso medida de aseguramiento en centro carcelario a Jesús Enrique Torres, alias Chucho, por su presunta participación en el crimen de dos indígenas Kankuamos, ocurrido el 27 de julio de 2002, en el corregimiento Sabana Crespo, en Valledupar (Cesar).
El procesado fue vinculado como presunto coautor de homicidio en persona protegida, en concurso heterogéneo con concierto para delinquir agravado.
La investigación permitió conocer que un grupo de autodefensas que delinquió en la Costa Atlántica interceptó a las dos víctimas, identificadas como Adinael Arias Pacheco y Rolando Rafael Arias Arias, las amarró y les disparó con fusiles.
Leonardo Enrique Sánchez Barbosa, alias Paisa, cabecilla de la estructura que ejecutó el crimen, y otras personas que confesaron su responsabilidad en el mismo, revelaron que asesinaron a los dos indígenas Kakuamo porque Jesús Enrique Torres los culpó de ser supuestos colaboradores del ELN. Adicionalmente, se estableció que alias Chucho, vestido de camuflado y con un pasamontañas, habría acompañado a los homicidas hasta el lugar del ilícito.
Por estos hechos, pesaba una orden de captura contra Jesús Enrique Torres, la cual se hizo efectiva el pasado 25 de mayo, en Valledupar (Cesar), durante un procedimiento de registro de antecedentes judiciales que realizaba la Policía Nacional.
Luego de escuchar al detenido en indagatoria, el fiscal del caso, en el marco de la Ley 600 de 2000 (antiguo sistema penal) le definió la situación jurídica con medida privativa de la libertad.