Antioquia, Colombia, 26 marzo de 2025.- El asesinato de Eudaldo Álvarez Bedoya, de 53 años, ocurrió en las horas de la noche del 25 de marzo en la vereda La Avanzada, corregimiento Santa Inés, municipio de Andes. Este crimen se suma a la ola de violencia que sacude al Suroeste antioqueño y se registró casi al mismo tiempo que otro homicidio reportado en la zona. Según versiones preliminares, los agresores llegaron hasta el lugar para dispararle, y el cuerpo fue hallado por sus familiares, atado de pies y manos.
Debido a la lejanía del lugar, ubicado a más de cuatro horas de la zona urbana de Andes, los familiares trasladaron el cadáver por sus propios medios al Hospital San Rafael del municipio. Allí fue recibido en la morgue, donde se llevaron a cabo las labores forenses con el acompañamiento de unidades de la Sijín de la Policía Antioquia.
Este homicidio ocurrió en uno de los territorios más críticos del municipio de Andes, donde, con este caso, se han registrado ocho asesinatos en las últimas tres semanas. La violencia estaría relacionada con disputas por el control del microtráfico y otras rentas criminales. Según información de inteligencia, los hechos se enmarcan en una confrontación entre tres facciones del Ejército Gaitanista de Colombia (EGC) y los Halcones del Suroeste, una banda que tendría respaldo de La Terraza, una de las estructuras armadas organizadas más consolidadas de Medellín y el Valle de Aburrá.
El crimen se suma a una cadena de hechos violentos que han puesto en evidencia la crisis de seguridad que atraviesa esta subregión. Según testimonios de habitantes del corregimiento, en Santa Inés se habría producido un desplazamiento forzado de al menos 40 personas en las últimas semanas, aunque la alcaldía de Andes confirma oficialmente solo 18.
La presencia activa de grupos armados ilegales en la zona, que operan sin mayores restricciones a pesar de capturas y operativos oficiales, ha contribuido al aumento de los homicidios selectivos, dobles asesinatos con signos de tortura y desmembramiento, así como masacres.
Andes, Antioquia: violencia deja torturas, asesinatos, despalzaminetos forzados y una masacre en 2025
Uno de los casos recientes más alarmantes ocurrió el 19 de marzo, cuando cuatro personas fueron asesinadas entre los corregimientos Santa Inés y Santa Rita, cerca de la finca La Alegría, en la vereda Media Luna. Entre las víctimas estaban Ovidio de Jesús Cardona Henao y su hijo Hermis de Jesús Cardona Agudelo. Las otras dos víctimas, al parecer de nacionalidad venezolana, aún no han sido identificadas.
También se registraron los homicidios de Andrés Bedoya Agudelo el 7 de marzo, en el mismo corregimiento de Santa Inés, y de Diego Alejandro Zuleta, asesinado el 8 de marzo en la vereda La Libia del municipio de Betania. El 10 de marzo fueron ultimados los hermanos Héctor y Alejandro Chaverra Burgos en un taller en el casco urbano de Andes.
Durante 2025, el Suroeste antioqueño ha registrado más de 90 casos de violencia, posicionándose como la subregión más afectada del departamento, incluso por encima del Valle de Aburrá.
La ONG Corpades ha alertado de manera constante, desde hace más de un año, sobre el incremento de las amenazas en esta zona, atribuidas principalmente a disputas entre estructuras criminales por el dominio de corredores estratégicos y territorios clave.
Paradójicamente, los hechos más recientes de violencia ocurrieron pocas horas después de un consejo de seguridad realizado en el municipio de Hispania, convocado precisamente para atender esta preocupante situación.
A.U.