•Gracias al trabajo técnico y el cuidado especializado en esta área, el 75% de los animales que ingresan a la sala de neonatos sobreviven y avanzan a etapas clave de rehabilitación.
Valle de Aburrá, junio 23 de 2025- Uno de los espacios más especiales que tiene el Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación de Fauna Silvestre (CAVR) es su área de neonatos. En este espacio se destaca la labor silenciosa pero fundamental que cumplen los zootecnistas.
La zootecnia se transforma en una herramienta vital para la supervivencia de cientos de animales silvestres que llegan en condiciones de vulnerabilidad, especialmente neonatos e infantes que han sido abandonados, cuya madre ha muerto o que han sido arrebatados de su entorno natural por el tráfico ilegal.
Casos como los de zarigüeyas, ardillas y aves recién nacidas, que ingresan sin posibilidad de retornar de inmediato a la vida silvestre, requieren una intervención especializada. Y es ahí donde el conocimiento zootécnico hace la diferencia, al garantizar una nutrición adecuada, el cuidado constante y el desarrollo sin impronta, es decir, sin que el animal reconozca al humano como parte de su especie.
Uno de los principales retos en el manejo de estos animales es diseñar dietas específicas según los requerimientos de cada especie, mantener temperaturas óptimas las 24 horas del día y evitar el contacto excesivo con los cuidadores. Gracias al trabajo del equipo técnico, liderado en parte por zootecnistas, el 75% de los animales atendidos en la zona de neonatos logran avanzar a etapas que les permiten continuar su proceso de recuperación.

En lo corrido de 2025, el CAVR ha recibido en su sala de neonatos en promedio 250 animales cada mes, de los cuales el 59% son aves, el 29.5% mamíferos y el 11.5% reptiles o anfibios. Solo en lo que va de junio se registraron 185 ingresos, siendo las aves el grupo más representativo, con un 58.9% de los casos.
Entre los animales que más llegan a esta zona se encuentran especies como las aves de tamaño pequeño como: azulejos, mayos, golondrinas, canarios, verdulejos; además de zarigüeyas, ardillas, tortugas, iguanas y boas. En total, este año se han atendido más de 1.250 neonatos en procesos de crianza artificial.
Desde enero del 2024 hasta la fecha más de 4.200 animales neonatos e infantiles han requerido una atención especializada desde sus primeros días.
El trabajo de los zootecnistas en este contexto no solo representa una acción técnica y profesional, sino un compromiso profundo con la vida silvestre. Gracias a su experiencia, sensibilidad y conocimiento, animales que alguna vez estuvieron condenados a no sobrevivir, hoy tienen una segunda oportunidad.
El Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación de fauna silvestre del Área Metropolitana es un proyecto que se desarrolla en convenio con la Universidad CES.