Ginebra, 7 de marzo de 2022.- La alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, urgió este lunes a las autoridades de Sudán a poner fin al estado de emergencia impuesto tras el golpe de Estado del 25 de octubre de 2021, y a que investiguen las violaciones de derechos humanos cometidas desde entonces.
Al menos 85 personas, entre ellas 11 niños, han fallecido por el uso excesivo de la fuerza contra las manifestaciones pacíficas que desde entonces han mostrado su oposición al golpe militar, señaló Bachelet en el debate sobre la situación en Sudán que se celebró hoy en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
La asonada militar «ha hundido al país en una crisis profunda» y ha supuesto una grave erosión de la reforma institucional y legal iniciada por el país africano hace dos años, subrayó Bachelet en su intervención.
La alta comisionada expresó su preocupación por los ataques a manifestantes y opositores incluso en hospitales donde son tratados de sus heridas, y en este sentido su oficina ha documentado incidentes de este tipo en seis centros hospitalarios sudaneses.
«En ocasiones golpearon y detuvieron a manifestantes heridos y asaltaron al personal médico», denunció Bachelet, quien también señaló que conductores de ambulancia sufrieron acoso cuando intentaban llevar a opositores a los hospitales.
En los últimos cuatro meses más de mil personas, entre ellas 148 niños, han sido detenidas por su oposición al golpe, incluyendo 63 cargos gubernamentales y otras personalidades influyentes, indicó Bachelet, quien también denunció acoso a periodistas, líderes sindicales, activistas por los derechos de la mujer y abogados.
«Es urgente que las autoridades sudanesas avancen hacia la reinstauración de una administración de carácter civil, basada en la democracia y el estado de derecho. Que caminen hacia la justicia, la igualdad, la paz y la dignidad para el pueblo sudanés», concluyó Bachelet.
EFE