Brasilia, 10 de diciembre de 2021.- El mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, intervino este viernes en la Cumbre por la Democracia convocada por el presidente de EE.UU., Joe Biden, ante la cual instó a adoptar medidas para garantizar la libertad, incluso en la internet.
Bolsonaro envió a la cumbre un mensaje grabado, de tres minutos, en el que subrayó que trabaja «con determinación para forjar una cultura de diálogo» y «fortalecer la libertad de pensamiento, hasta en la internet», todo en favor de una «democracia saludable».
Sostuvo que su Gobierno «valora la libertad de expresión» y se guía por el «respeto a los derechos humanos y derechos fundamentales de todos los brasileños», sin «ninguna forma de discriminación».
Bolsonaro, nostálgico de la última dictadura (1964-1985) y quien ha llegado a promover y participar en actos de la ultraderecha en los que se exigía «suprimir» el Congreso y la Corte Suprema mediante una «intervención militar», subrayó su compromiso con la democracia y la lucha contra la corrupción.
«Estamos llegando a tres años (en el poder) sin una denuncia contra nuestro Gobierno, al contrario de lo que ocurría» en las gestiones anteriores, afirmó, para agregar que está empeñado «en fortalecer los mecanismos para prevenir mejor la corrupción».
No citó, sin embargo, diversas investigaciones en torno a su propia actuación, sospechas y juicios contra tres de sus hijos que actúan en política y otras que afectan a varios de sus ministros y tramitan en los tribunales.
Bolsonaro, además, ha sido sancionado varias veces en las redes sociales por transmitir información falsa, en especial sobre la pandemia de coronavirus, cuya gravedad minimiza pese a que ya le ha costado la vida a cerca de 617.000 brasileños.
La última sanción se la aplicó YouTube, que suspendió su cuenta por una semana después de que afirmó que las personas vacunadas contra la covid-19 corrían más riesgo de contraer sida.
La Cumbre por la Democracia, promovida por Biden, reunió entre jueves y viernes, de forma virtual, a líderes de más de un centenar de países, con el objetivo enfrentar al autoritarismo y promover los derechos humanos.
EFE