Bruselas, 18 mayo.- El alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, pidió hoy un «alto al fuego» entre Israel y Palestina, tras la escalada bélica que dura ya nueve días, al término de una reunión de los ministros de Exteriores, en la que Hungría se negó a apoyar una declaración común.
«La prioridad es el inmediato cese de toda violencia y la implementación de un alto al fuego. No solo acordarlo, sino implementarlo», dijo Borrell al término de una reunión informal de los ministros de Exteriores de la UE, celebrada por videoconferencia, para abordar la situación en Oriente Medio.
Borrell no pudo hablar hoy en nombre de los veintisiete Estados miembros, porque Hungría se negó a acordar un comunicado conjunto tras el encuentro, por lo que en la rueda de prensa resumió el «sentido general» del debate que mantuvieron los jefes europeos de la diplomacia.
Y como vino haciendo en los últimos días, condenó el lanzamiento de cohetes desde Gaza contra Israel por parte del grupo islamista palestino Hamás -un total de 3.440, según el Ejército israelí-, mientras reconoció el derecho de Israel a defenderse, aunque «de forma proporcional» y respetando el derecho internacional humanitario.
Desde que se intensificó la violencia entre Israel y las milicias de Hamas y Yihad Islámica, han muerto ya más de 200 palestinos y 10 israelíes.
Según el resumen que hizo Borrell, hubo un «fuerte apoyo» entre los ministros para que no se lleven a cabo los desahucios de varias familias palestinas en el barrio de Seij Jarrah, en Jerusalén Este, cuya posibilidad ha desencadenado el conflicto actual.
Borrell también pidió que se puedan celebrar las elecciones palestinas que Israel ha impedido y, a largo plazo, que ambas partes vuelvan a relanzar el proceso de paz.
EFE