Brasilia, 13 de agosto de 2025.- El Gobierno brasileño anunció este miércoles un paquete de ayuda a los sectores afectados por los aranceles decretados por el presidente de EE.UU., Donald Trump, que incluye créditos por 30.000 millones de reales (5.555 millones de dólares o 4.761 millones de euros).
La medida responde a las sanciones comerciales que gravan en un 50 % las exportaciones brasileñas hacia Estados Unidos y, de acuerdo al ministro de Hacienda, Fernando Haddad, beneficiarán en especial a las pequeñas y medianas empresas volcadas al comercio exterior.
Según Haddad, es una primera respuesta del Gobierno a «una situación inédita», en la que «Brasil está siendo sancionado por ser más democrático que su agresor» y llevar a los tribunales a quienes atentaron contra el orden constitucional, en clara alusión al expresidente Jair Bolsonaro.
Además de los créditos y una búsqueda de nuevos mercados, el plan prevé aumentar las compras gubernamentales, sobre todo de alimentos y en especial de aquellos perecederos que son exportados a Estados Unidos, así como beneficios tributarios para los sectores afectados por las sanciones.
Se trata en mayor medida de carnes y frutas, que forman parte del 35 % de las exportaciones brasileñas a EE.UU. que han sido gravadas en un 50 %.
En la ceremonia, encabezada por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, participaron representantes del sector privado que expresaron apoyo a las medidas, respaldadas desde la política con la presencia de los presidentes de la Cámara de Diputados y el Senado, Hugo Motta y Davi Alcolumbre.
Los aranceles a los productos brasileños están en vigor desde el 6 de agosto y Trump los justificó sobre todo con el juicio penal por golpismo que cursa en la Corte Suprema contra el expresidente Jair Bolsonaro.
Brasil ha intentado entablar una negociación desde un punto de vista estrictamente comercial, pero hasta ahora Trump le ha cerrado las puertas y puesto como condición el fin del proceso que puede llevar al líder de la ultraderecha brasileña a prisión.
La Casa Blanca también alegó un supuesto déficit comercial con Brasil, que ha sido desmentido por las cifras que maneja el propio Gobierno estadounidense.
Brasil sostiene que Estados Unidos mantiene saldos favorables en la relación bilateral desde hace cinco lustros, por lo que considera esas sanciones de un claro tenor político.
En 2024, Estados Unidos recibió el 12 % de las exportaciones de Brasil, que sumaron 40.300 millones de dólares, en tanto que las importaciones desde la mayor economía mundial fueron por 40.500 millones de dólares.
EFE