Sofía, 27 oct – La formación de centroderecha GERB, del exprimer ministro Boiko Borisov, ganó las séptimas elecciones generales en tres años y medio en Bulgaria, celebradas este domingo, obteniendo entre el 26 y el 27 % de los votos, según los primeros sondeos a pie de urna tras el cierre de los colegios.
Este resultado es insuficiente para gobernar con mayoría, por lo que necesitará formar coalición con al menos otros dos socios en un Parlamento muy fragmentado y profundamente dividido por vetos cruzados.
En segundo lugar, según las encuestas de Market Links y Alpha Research, se coloca la coalición reformista y europeísta Continuamos el cambio-Bulgaria Democrática con casi el 15%.
El líder del GERB, el exprimer ministro populista Boiko Borisov, ha indicado durante la campaña que ve esta formación como el socio preferido para un eventual Gobierno.
Ambas partidos formaban parte del último Ejecutivo, que duró apenas diez meses, mediante un acuerdo de rotación de primer ministro.
En marzo pasado, este Gobierno se derrumbó por desacuerdos en el programa de reformas y legislación anticorrupción, llevando al país a las elecciones de junio pasado y, al no conseguirse la formación de un Ejecutivo, a las actuales.
La tercera formación más votada, con un 12% según los sondeos, es la ultranacionalista y prorrusa Resurrección, que aboga por la salida de Bulgaria de la UE y la OTAN, el cese de la ayuda a Ucrania en su lucha contra Rusia y el aplazamiento de la adopción del euro en Bulgaria, por lo que ninguna de las formaciones mayores lo considera un posible socio.
En cuarto y quinto lugar vienen las dos escisiones del Movimiento por Derechos y Libertades (DPS), representante de la minoría turca de Bulgaria, ambas con un 8 – 10 % de los votos.
Una, DPS-Nuevo Comienzo, está encabezada por el oligarca Delyan Peevski, sancionado por Estados Unidos y Reino Unido por corrupción, y la otra por el fundador del DPS, el empresario Ahmed Dogan, también acusado de estar implicado en actividades ilícitas.
Al menos otras dos formaciones entran en el hemiciclo: el Partido Socialista Búlgaro, heredero del partido comunista, con lazos históricos con Moscú, que recibe entre el 7 y el 8%, y el antisistema Existe Tal Pueblo, con un 6%, mientras que el populista Grandeza roza el umbral del 4% y puede quedar fuera.
La participación electoral, tal como ya se preveía durante la campaña, se sitúa cerca del 33,5 %, muy similar a la de las elecciones de junio, la más baja en décadas.
Vladislav Punchev
EFE