Repudiamos acusaciones falsas que ponen en riesgo a un miembro de Prensa Rural y del equipo editorial de Kaos en la Red Prensa Rural y Kaos enlared
lanzan campaña de solidaridad con las Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra – ACVC, la Asociación Campesina del Catatumbo – Ascamcat y los corresponsales alternativos agredidos en Colombia Kaos en la Red, Agencia Prensa Rural /
Martes 6 de agosto de 2013
El pasado 31 de julio de 2013,en la ciudad de Cúcuta (Norte de Santander), en el marco de la rueda de prensa que organizó Jaime Restrepo, representante legal de la Asociación de Víctimas de la Guerrilla Terrorista, junto a otras organizaciones vinculadas a la derecha colombiana, para presentar el informe de sus observaciones sobre la situación en las protestas en Tibú que se alargaban por 52 días, después de su visita de terreno a la zona afectada se produjo el último ataque contra la libertad de expresión contra los medios de comunicación alternativos que ubren la información sobre el conflicto campesino.
El representante legal de la Asociación de Víctimas de la Guerrilla Terrorista, acusó públicamente a nuestro compañero Carlos García de tener vínculos con el grupo armado vasco ETA y las FARC-EP y afirmó que Prensa Rural hace un trabajo de masas en favor de la insurgencia colombiana.
Carlos García, ciudadano del estado español, fue amenazado con ser investigado ya que de acuerdo a las palabras del propio Restrepo “españoles que tienen que hacer en Colombia”; cuando nuestro compañero intentó explicar su trabajo como defensor de derechos humanos y periodista, la respuesta del señor Restrepo fue “¿Cuáles derechos humanos? A favor del terrorismo”. Por otro lado, el señor Restrepo, acusó a miembros de Prensa Rural de manipular elementos explosivos y animar a la turba a usar la violencia contra la fuerza pública. Estas afirmaciones falsas e infundadas son un acto de violación a la libertad de expresión ya que, precisamente gracias a la presencia de Prensa Rural y otros medios de comunicación alternativos e internacionales, se evitó que las violaciones a los derechos humanos, ya de por sí incontables por parte del fuerza pública, fueran mucho mayores.
En las protestas del Catatumbo, Verónica Luna, Fred Núñez, Julio Pulido, Fabián Rojas y Milton Henao, comunicadores de los medios de comunicación Prensa Rural, Indepdendencia TV, Colectivo Brecha y TeleSur, también resultaron agredidos, en este caso por la por la fuerza pública. El más afectado fue Núñez, que requirió hospitalización por los objetos arrojadizos convencionales y no convencionales que la Fuerza Público utilizó contra él. Ese extremo da a conocer la peligrosidad del ejercicio periodístico en favor de la información veraz.
Carlos García es corresponsal de Prensa Rural y miembro del equipo editorial de Kaos en la Red, ambos medios de información alternativa. Queremos rechazar de manera frontal las acusaciones y difamaciones por parte del señor Restrepo , que ponen en peligro la integridad física, no solamente de Carlos García, sino de las y los colaboradores de Prensa Rural.
Prensa Rural es de los pocos medios de información que ha dado voz, históricamente, a los movimientos sociales campesinos de Colombia y en especial a los voceros populares del conflicto que actualmente se está viviendo en Catatumbo (norte de Santander). Por estas razones, se les acusa de estar detrás de las protestas campesinas. En numerosas ocasiones sus corresponsales han sido lesionados, insultados y reprimidos al momento de cubrir las represiones policiales en Catatumbo y en otros lugares del país.
Kaosenlared, como medio hermano, ha procurado visibilizar y ser altavoz de las informaciones relativas a la lucha campesina y las violaciones de Derechos Humanos de los diferentes actores armados legales e ilegales, en Colombia, especialmente durante los últimos dos meses, durante el conflicto social y político que se presenta en el Catatumbo, que es el mismo pendiente de solución desde hace más de 100 años y que existe en grandes zonas del país.
Las acusaciones de Restrepo en contra de Carlos García y Prensa Rural resultan de una delicadeza y seriedad extrema, dado el ambiente de represión y persecución que se vive en Colombia contra las organizaciones sociales y medios de comunicación alternativos y podrían desembocar en un atentado contra la integridad de los corresponsales de la Agencia Prensa Rural y los líderes de las Asociaciones Campesinas del Valle del río Cimitarra y Catatumbo. Colombia es uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, a pesar de que la gran mayoría de medios están íntimamente alineados con los intereses de los poderosos y orientados al mantenimiento del estatus quo bajo el sistema capitalista.
Kaos en la red y Prensa Rural condenamos y rechazamos estas acusaciones sin fundamento en contra de nuestro compañero Carlos García, la Asociación Campesina del Catatumbo, la Asociación Campesina del Valle del río Cimitarra y Prensa Rural y deseamos lanzar una campaña conjunta de solidaridad para que las diferentes organizaciones sociales y medios de comunicación alternativos y generalistas, a nivel internacional nos acompañen en solidaridad con esas organizaciones sociales, perseguidas continuamente por el paramilitarismo, la fuerza pública, y los diferentes estamentos del estado colombiano que pretenden eliminarlas.
Negamos categóricamente la pertenencia de los compañeros a cualquiera de los grupos armados que menciona el señor Restrepo, y le emplazamos a que presente pruebas de sus dichos, algo que resultará imposible ya que no existe ninguno de los vínculos que menciona.
Invitamos a cualquier persona u organización social que lo desee, a firmar este comunicado de solidaridad y para exigir que la Fiscalía General de la Nación tome cartas en el asunto y agilice los procesos que ya existen, en el mismo sentido, contra el señor Jaime Restrepo y proceda a imponer, según su criterio, una ejemplar sanción para evitar que esta situaciones se vuelvan a repetir.
Responsabilizamos al señor Jaime Restrepo y a la Asociación de Víctimas de la Guerrilla Colombiana de lo que pueda ocurrirle a nuestro compañero.
Colectivo Kaosenlared y Agencia Prensa Rural