Los Caparrapos son herederos del paramilitarismo, hace unos años eran conocidos como Los Chepes, en la actualidad se sabe que han fortalecido sus ingresos económicos con empresas propias en el campo de la construcción, ingeniería y vías, son fuertes en la contratación estatal a gran escala con vías terciarias y primarias de conexión municipal.
En el tema agrícola y minero tienen parte del manejo de abastecimientos, venta y alquiler de maquinaria para minería con el agravante de que sólo se puede utilizar sus equipos para desarrollar la explotación minera.
Todas las empresas sin excepción alguna pagan la vacuna o el arancel como Los Caparrapos llaman al cobro de la extorsión, el cual se cobra para que se pueda ejecutar la contratación privada y pública al igual que los contratos de interconexión energética.
Los Caparrapos han sido denominados así porque algunos de sus fundadores vienen del municipio de Caparrapí en el departamento de Cundinamarca, además muchos provienen de las organizaciones paramilitares desmovilizadas parcialmente como el Bloque Mineros, Bloque Central Bolívar y Bloque Norte de las AUC.
Los Caparrapos son considerada una de las organizaciones paramafiosas más sanguinaria y poderosa del Bajo Cauca antioqueño, cuentan con más de 3000 miembros.
a la fecha la institucionalidad sigue negando su existencia.
Afirma Rocío Arias que en cualquier momento se desatará una guerra entre paramilitares por el control del Bajo Cauca, está sería entre Los Caparrapos y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) Análisis Urbano y Corpades, esperan que el Estado colombiano no actué tardíamente.
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