Categoría: Análisis

Una fuente le habló a Análisis Urbano: «En mi casa había 4 [hombres], se metieron por el monte, no nos dejaban hablar. Mi familia se encerró en el baño. Cuando llegó la Policía [a dar ronda] ellos seguían adentro. [Supimos que] en la casa del lado tenían un herido… ellos se comunicaban por radio. De otra casa la Policía sacó a uno de ellos».

El incumplimiento por parte del Gobierno nacional ha conllevado a que los militantes de la exguerrilla de las FARC desconfíen de los acuerdos y, a su vez, la coordinación general de la organización pierda poder en sus líneas de base.

Las AGC deben entregar la totalidad de sus tropas —que no son 3.000 miembros, como afirma la institucionalidad—, rutas del narcotráfico, armas y relacionamiento político en Urabá, Bajo Cauca y 22 departamentos donde políticos han hecho alianzas para hacerse elegir, algunos de ellos reincidiendo en la parapolítica, y otros estrenándose, lo que les permite pasar incólumes en las investigaciones por corrupción y beneficiándose de la minería ilegal.