Medellín (Colombia), 22 jul – Una explosión de texturas abrió este lunes Colombiamoda con una colección que propone, a través de la artesanía textil, la exploración y la curiosidad, una reflexión sobre el tiempo hostil que transita el mundo, al estar expuesto a guerras, a lo efímero y a ignorar las heridas.
En el antiguo edificio de Coltabaco, un símbolo de la industrialización de Medellín y el escenario elegido para levantar el telón de la edición 35 de la feria, el diseñador colombiano Nicolás Rivero, con su marca A New Cross, desveló 30 creaciones bajo el nombre ‘Proceso’, una colección que captura el viaje entre una idea y su resultado.
«Atravesamos un tiempo en el que estamos expuestos a la guerra, a lo efímero, a sencillamente maquillar las heridas que tenemos o a ignorarlas», expresó a EFE Rivero, quien definió el contenido de sus desfile como un «proyecto resolutivo» que busca entender «cómo tenemos la capacidad restaurativa para sanar y para curar».
La puesta en escena fue una «propuesta sensorial» que llevó a los asistentes a adentrarse en la mente creativa del diseñador y en la parte «más íntima» de su marca al cómo se produce una colección en medio de una «crisis global».
Las prendas desveladas en medio de una atmósfera industrial, con techos descubierto, tuberías a la vista y columnas integradas al escenario, fueron confeccionadas con fibras naturales como linos, sedas, alpaca y algodones, además con novedosas puntadas en fibra de plátano y fique, y detalles únicos como botones de cerámica de La Chamba, considerada de tradición ancestral.
La Chamba es una población del departamento del Huila, en el sur del país. Allí la gente se ha convertido en la parte de Colombia en la que el trabajo artesanal depende de los cuatro elementos que brinda la naturaleza: tierra, agua, aire, fuego y el amor como quinto componente para elaborar piezas únicas en arcilla.
Texturas que evocan costras
Rivero explicó que en ‘Proceso’ hizo «estallar estas texturas» y lo que los asistentes vieron en la inauguración fueron prendas cargadas de texturas «casi que de una manera barroca», desde el minimalismo que hace A New Cross, lo cual es «un poco contradictorio y ambivalente».
La intención con el uso de las texturas, que se vuelven «imposibles de ignorar», es crear una analogía con «la costra que estamos haciendo por medio de esta gigantesca herida social que nos traslapa a todos».
La pasarela se inundó especialmente con prendas monocromáticas que son el resultado de un proceso de conceptualización y fabricación «meticuloso» que tomó casi dos años de trabajo con particular atención al detalle y el uso de la artesanía textil.
El escenario conectó con la estética del desfile y el concepto de A New Cross, un proyecto de moda colombiana con 15 años de trayectoria que resalta el textil como un gran contenedor de memoria
«Esta pasarela inaugural seguramente va a marcar un precedente muy importante en el sistema moda», anticipó Rivero.
Colombiamoda, que se extenderá hasta el jueves para celebrar sus 35 años, se transformó en un «Circuito de Ciudad» al conectar las industrias creativas en una ruta integrada por 24 locaciones con la intención de poner a circular la moda por toda la urbe.
EFE
Jeimmy Paola Sierra