En horas de la tarde de este jueves 20 de septiembre se lanzó una voz de alerta desde el resguardo indígena de Islas, en la cuenca del río Murindó, en el municipio del mismo nombre ubicado en la subregión de Urabá, Antioquia.
Hombres vestidos de camuflado descendieron desde helicópteros, detuvieron a los indígenas y prendieron fuego a los ranchos, según la información proveniente del resguardo. Las autoridades indígenas exigieron a los militares que salieran inmediatamente de sus territorios.
La situación obligó a que la mesa interétnica, que agrupa a comunidades indígenas, campesinas y afrodescendientes, se reuniera en el casco urbano para analizar la difícil situación que se vive en el Atrato medio.
La denuncia de las autoridades indígenas da cuenta también de fuertes operativos en la cuenca del río Jiguamiandó y el río Curvaradó, donde las tropas militares al parecer se enfrentaron con los campesinos cultivadores de la hoja de coca.
“Los militares entraron con la orden de erradicar forzadamente las matas ante lo cual los campesinos se niegan ya que los acuerdos hablan de sustitución gradual y concertada de los cultivos de uso ilícito”, dice la alerta.
Horas después de darse a conocer esta alerta, la Organización Indígena de Antioquia, OIA, expidió un comunicado en el que denuncia ante la “opinión pública nacional e internacional” que por enfrentamientos entre el Ejército Nacional y presuntos integrantes del Eln habría algunas familias indígenas Embera Eyábida afectadas.
“Son pocos los datos que hasta ahora se han podido consolidar del más reciente enfrentamiento armado entre hombres de la fuerza pública y posibles guerrilleros del Eln en resguardos indígenas de Antioquia. Sin embargo, el consejo de Gobierno Mayor, a través del Sistema de Alertas Tempranas de la OIA, pudo establecer que a eso de las 11:45 de la mañana de hoy, tropas del Ejército avanzaron decididas desde el sector conocido como Gedega, hasta la comunidad Isla, donde habitan 74 familias indígenas, algunas de las cuales habrían quedado en medio del fuego cruzado que tardo más de una hora y media en terminarse”, describe el comunicado.
Agrega el texto que “hasta ahora no se conocen las afectaciones reales de este enfrentamiento, entre tanto un grupo de líderes y autoridades indígenas acompañados por la Guardia, lleguen hasta el lugar donde se libró la batalla que arremetió también desde el aire con el apoyo de dos helicópteros, uno de los cuales indiscriminadamente, atentó contra un grupo de indígenas que se encontraban en el territorio, luego de una comisión en la comunidad Coredó del mismo resguardo y que por su agilidad y conocimiento de la selva, lograron refugiarse y salir ilesos de este irresponsable ataque a la población civil, entre los que se encontraba el Secretario General Indígena de este municipio, del Urabá antioqueño”.
Las comunidades indígenas de Antioquia rechazaron categóricamente “este tipo de iniciativas militares inconsultas, que ponen en riesgo la vida y la integridad de las comunidades y sus habitantes entre ellos niños, niñas y ancianos” y exigieron el respeto pleno a los actores armados legales e ilegales por los territorios indígenas, “que son de nuestro uso, manejo y protección exclusivo de las autoridades y comunidades indígenas de Antioquia que lo habitan”.
Una vez se conozcan más detalles de lo ocurrido, la Autoridad Indígena Regional convocará a una rueda de prensa para dar a conocer los pormenores de este hecho.
Finalmente, las comunidades indígenas declararon que son hombres y mujeres de paz y que desde sus territorios quieren transformar la historia del país, “por lo que hacemos un llamado al Gobierno del presidente Iván Duque Márquez, a buscar de manera urgente una salida negociada al conflicto con los distintos actores armados que acechan los territorios indígenas, no sólo de Antioquia, sino también del país”.
