Este martes el ministro de Justicia y del Derecho, Wilson Ruiz Orejuela, acompañado por el equipo del viceministerio de Promoción de la Justicia que encabeza Francisco Chaux Donado, expuso las medidas de política pública en las que trabaja su cartera para mejorar la condición institucional de las comisarías de familia.
A través de la modalidad virtual denominada ‘Café del Mundo’ se explicó de manera detallada la hoja de ruta que sigue el Ministerio para fortalecer dichas entidades, ofrecer un mejor servicio e impedir que se violen los derechos humanos y se atente contra la vida de niños, niñas, adolescentes, mujeres, adultos mayores y personas en condición de discapacidad.
Durante su intervención, el Ministro Ruiz destacó la labor de los comisarios y comisarias, y su rol fundamental en la atención primaria de los casos de violencia en el contexto familiar. “Las comisarías de familia son el punto de partida para prevenir la violencia y proteger y atender oportunamente a personas en riesgo y víctimas de violencia, que en la mayoría de los casos son mujeres”, explicó.
Citando la política de legalidad que promueve el Gobierno del Presidente Iván Duque, el alto funcionario detalló la ruta a seguir apoyándose en tres ejes neurálgicos: el primero, el Proyecto de Ley que regula la creación, conformación y funcionamiento de las comisarías de familia, y que además busca establecer un ente rector que oriente técnicamente el trabajo de dichos centros.
El proyecto busca, además, subsanar problemas como el de la vinculación de los comisarios, comisarías y sus equipos interdisciplinarios. Frente a este asunto el alto funcionario recordó que según la Procuraduría, en la Segunda Vigilancia Superior a las Comisarías de Familia, llevada a cabo en 2019, se encontró que la vinculación que predomina en dichos centros es la de prestación de servicio, con el 43. Le siguen la provisionalidad (38,6%) y la carrera administrativa (13,6 %).
El segundo eje tiene que ver con el mejoramiento de la capacidad técnica de estas comisarías mediante procesos de formación para quienes laboran en ellas. De esta manera se busca incrementar el conocimiento en cuanto a asuntos de género, atención inclusiva y no discriminación, mejorando la respuesta a las violencias que se dan en el contexto de la familia.
Frente a lo anterior, la cartera de justicia realizó 12 webinars dirigidos a comisarios y comisarías de familia de todo el país en el que participaron 4.607 personas y en los que se abordaron temas como violencias por razones de género, primeros auxilios psicológicos, protección de niños, niñas, adolescentes y personas mayores y funciones de las comisarías de familia.
Así mismo, se habló acerca del fortalecimiento de la herramienta virtual Legalapp, que permite a la ciudadanía saber cómo adelantar un trámite o hacer uso de algún servicio relacionado con la justicia. En alianza con la Universidad Libre se incorporó un chat a través del cual se puede acceder a orientación y asesoría jurídica inmediata sobre temas relacionados con violencia en el contexto de la familia.
Y el tercero es el de información y generación de sinergias entre las comisarías de familia de todo el país a través de la herramienta virtual Conexión Justicia. Dicha herramienta -avalada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE)- reúne en un mismo sitio información jurídica relevante para las comisarías de familia, lineamientos técnicos e insumos generales para que su trabajo resulte mucho más eficiente y para que la atención a la ciudadanía sea cada vez mejor.
Para el ministro Ruiz, la aprobación del proyecto de ley de reforma a estas comisarías es muy importante, ya que propone que su ente rector sea la cartera de Justicia. “De ser aprobado, el Ministerio deberá establecer los protocolos, guías y rutas de atención de obligatorio cumplimiento por parte de todas las comisarías de familia del país”, aseguró.
Así las cosas, de ser convertida en ley de la República, esta iniciativa facultará al Ministerio de Justicia para crear y administrar el sistema de información de las comisarías y para garantizar la formación periódica de los funcionarios que laboran en ellas. De esta manera la cartera llevaría el registro de dichos centros, diseñaría campañas de prevención de violencias en el contexto familiar y ejercería funciones de inspección, vigilancia y control.
