Brasilia, 21 de septiembre de 2021.- La comisión del Senado brasileño que investiga la gestión de la pandemia de coronavirus por parte del Gobierno denunció este martes unas supuestas «amenazas» de uno de los hijos del presidente Jair Bolsonaro.
Varios de los miembros de la comisión consideraron una «amenaza» a los senadores y al propio Parlamento un video difundido por Renan Bolsonaro, de 23 años y el cuarto hijo del mandatario, en el que se mostró en una tienda de armas y escribió al pie: «Alo CPI», siglas de la Comisión Parlamentaria de Investigación.
Renan Bolsonaro ha sido mencionado en las investigaciones del grupo parlamentario por sus relaciones con un empresario que intermedió en turbias negociaciones que intentaron venderle al Gobierno vacunas contra la covid en operaciones fraudulentas.
Su madre, Ana Cristina Valle y segunda esposa del presidente, ha sido convocada a declarar sobre ese asunto, en el que también se presume que pudo haber participado, y Renan Bolsonaro reaccionó con ese video, que el presidente de la comisión, Omar Aziz, consideró este martes «inaceptable» y una «clara amenaza».
El senador Alessandro Vieira, uno de los miembros de la comisión, sugirió que Renan Bolsonaro también sea convocado a declarar, lo cual generó duras protestas de los miembros de la comisión del arco gubernamental, con lo cual la discusión del asunto fue postergada.
Aziz estancó el debate, pero aclaró que se ha dirigido al presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, a fin de que estudie el video del hijo del gobernante y determine las acciones que deben ser adoptadas «en defensa del Parlamento frente a esas amenazas».
La comisión parlamentaria investiga desde hace meses la gestión del Gobierno de Bolsonaro frente a la pandemia, que ya ha causado en Brasil casi 591.000 muertes por coronavirus y más de 21,1 millones de casos.
El grupo ya tiene vasto material sobre otros asuntos que habrían influido en el agravamiento de la pandemia en Brasil, uno de los países más afectados del mundo junto con Estados Unidos y la India.
Uno de esos factores habría sido la insistencia del Gobierno en promover en la salud pública el uso masivo de remedios de eficacia no comprobada contra la covid-19, como la cloroquina, incluida en un cóctel calificado de «tratamiento precoz» que el propio Bolsonaro defendió este martes en la Asamblea General de las Naciones Unidas.
«Yo fui uno de los que hizo ese tratamiento inicial», indicó el mandatario al intervenir en la ONU en referencia a cuando contrajo covid-19; dijo no entender «cómo muchos países y parte de los medios de comunicación se pusieron en contra», y agregó que «la historia y la ciencia sabrán responsabilizar a todos».
