Medellín, Colombia, 14 octubre de 2024.- La violencia sigue cobrando vidas en Medellín, esta vez en la comuna 13, San Javier. En la noche del 13 de octubre, Diego Alejandro Ospina Gómez, un hombre de 39 años, fue asesinado a tiros por sicarios mientras se encontraba en un establecimiento comercial del sector. Este nuevo hecho de sangre suma una víctima más al historial de homicidios de la ciudad, generando una profunda preocupación en la comunidad local.
El ataque ocurrió en la noche del 13 de octubre y la inspección técnica al cadáver fue a las 12:15 a.m., del 14 de octubre.
El hecho violento se registró en un bar del barrio San Javier, donde Diego Alejandro departía con amigos. Según testigos, dos sicarios en motocicleta llegaron al lugar, ingresaron sin mediar palabra y dispararon repetidamente contra Ospina, dejándolo gravemente herido. El violento suceso causó pánico entre los presentes, quienes intentaron auxiliar a la víctima mientras los agresores huían del lugar.
Perfil de la víctima
Diego Alejandro Ospina, originario de Armenia, Quindío, era miembro de una reconocida familia vinculada al comercio en su ciudad natal. Era sobrino de Néstor Vanegas, un empresario conocido en la región por su empresa Avisos Alvan. Diego había viajado a Medellín, donde se encontraba al momento del ataque. Tras el atentado, fue trasladado a un centro asistencial, pero lamentablemente falleció debido a las múltiples heridas de bala.
La familia de Ospina ha vivido momentos de profunda conmoción tras enterarse del asesinato. Sus seres queridos viajaron a Medellín para reclamar el cuerpo y trasladarlo a Armenia, donde recibiría cristiana sepultura. Su trágica muerte ha dejado una huella en ambas ciudades, mientras las autoridades continúan investigando los motivos del homicidio y buscan a los responsables.
Investigación en curso
La Secretaría de Seguridad de Medellín y la Policía Metropolitana desplegaron un equipo de investigadores para esclarecer el ataque sicarial. Aunque aún no se ha determinado el móvil exacto del crimen, las autoridades no descartan ninguna hipótesis, incluidos posibles ajustes de cuentas o conflictos personales. El barrio San Javier, como otras zonas de la comuna 13, ha sido históricamente afectado por la violencia asociada a la delincuencia organizada.
De acuerdo con los reportes preliminares, los agresores eran dos individuos que se movilizaban en motocicleta. Entraron al establecimiento y dispararon directamente contra Diego Alejandro Ospina. La Policía realizó una inspección técnica en el lugar, recolectando evidencias y revisando cámaras de seguridad para identificar a los responsables. Hasta el momento, no se han realizado capturas.
El panorama de homicidios en Medellín
La muerte de Diego Alejandro Ospina eleva a 248 la cifra de homicidios en Medellín en lo que va de 2024. Aunque esta cifra representa una disminución de 51 casos en comparación con el mismo periodo de 2023, la violencia sigue siendo un desafío importante para las autoridades locales. San Javier, una de las comunas con mayor historial de violencia, ha registrado 18 homicidios en lo que va del año, un aumento de 8 casos respecto al año anterior.
Los homicidios en Medellín han sido perpetrados en su mayoría con armas de fuego, sumando 128 víctimas, mientras que 77 se han cometido con armas cortopunzantes. El Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (Sisc) indica que 58 de los homicidios están relacionados con problemas de convivencia, un factor que sigue siendo una preocupación central en la estrategia de seguridad de la ciudad.
Paz Urbana Total: avances y desafíos
A pesar de los eventos recientes, la administración local destaca que Medellín ha alcanzado 131 días sin homicidios en lo que va del 2024, un logro significativo comparado con el mismo periodo de 2023, cuando se registraron 110 días sin asesinatos. Este incremento de 21 días refleja el impacto positivo de la estrategia de «Paz Urbana Total», una iniciativa del Gobierno Nacional que busca reducir la criminalidad y promover la convivencia pacífica en los sectores más afectados por la violencia.
Sin embargo, los retos persisten. La comuna 13 sigue siendo uno de los focos de mayor atención para las autoridades debido a su pasado marcado por la violencia y la presencia de grupos delincuenciales. La administración municipal, junto con las fuerzas de seguridad, continúa desplegando operativos y programas de intervención social para mitigar la criminalidad y brindar mayor seguridad a los habitantes de esta zona.
La respuesta de la comunidad
La comunidad de San Javier ha expresado su indignación y temor tras el ataque a Diego Alejandro Ospina. Algunos vecinos manifestaron su preocupación por el aumento de los hechos violentos en la comuna y solicitaron a las autoridades un refuerzo en las medidas de seguridad para evitar que se repitan este tipo de sucesos. «No podemos seguir viviendo con miedo, no queremos que la comuna 13 vuelva a ser un lugar donde la violencia marque nuestras vidas», expresó un residente.
A nivel local, las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía para que coopere con las investigaciones proporcionando cualquier información relevante a través de las líneas de emergencia 123, que permitan avanzar en la captura de los responsables del homicidio de Ospina.
Reflexión final
La trágica muerte de Diego Alejandro Ospina es un recordatorio de que, aunque se han logrado avances en la reducción de homicidios, la violencia sigue siendo una realidad latente en algunas zonas de Medellín. Las autoridades, junto con la comunidad, continúan trabajando para garantizar que la «Paz Urbana Total» sea una meta alcanzable y sostenible, mientras enfrentan los desafíos que aún presenta la criminalidad en la ciudad.
A.U.