Más de 200 personas marcharon este viernes con camisetas blancas por las calles de Puerto Tejada, norte del Cauca, rechazando los asesinatos de los afrodescendientes, Anderson Arboleda de 19 años y Janner García de 22, supuestamente a manos de la policía.
«Pedimos justicia. No queremos que estos crímenes queden impunes y exigimos que los que hicieron esto, paguen», expresó Paola Santacruz, amiga de Janner.
Los familiares y comunidad, quienes en medio de la cuarentena salieron a protestar, piden una rigurosa investigación para esclarecer estos hechos que han llenado de tristeza a esta población nortecaucana.
La marcha dio inicio a las 9 de la mañana en el parque principal de la localidad y recorrió varias avenidas del municipio, concluyendo cerca del mediodía.
Anderson, falleció el pasado 20 de mayo por traumatismos en la cabeza causados, supuestamente, por un patrullero de la Policía con un bolillo. Mientras que Janner, según señala su familia, el pasado mes de abril un policía le quitó la vida con un arma de fuego sin él estar cometiendo algún delito.
Allegados de este último indicaron que ya se llevó a cabo la primera audiencia, en la cual los testigos de lo ocurrido dieron su versión de los hechos.
En cuanto al caso de Anderson, Claudia Arboleda, su madre, confirmó que fue puesta la denuncia formal en la Fiscalía.
A su vez, de forma virtual y como apoyo a esta iniciativa, se llevó una marcha contra el racismo liderada por el representante a la Cámara por las Comunidades Afro, Jhon Arley Murillo.
«El racismo no ha permitido que se establezcan medidas legales para tener igualdad. Por ejemplo, en el acceso a las oportunidades laborales, al igual que a mecanismos económicos donde se puedan producir y crear empresas para las comunidades afro», manifestó Murillo.
Según datos aportados por el congresista, sólo el 14 por ciento de los jóvenes afrocolombianos que termina el bachillerato acceden a la universidad, y de estos sólo el 3 por ciento logra terminar sus estudios superiores.
Tomado de El Tiempo