La Alcaldía de Medellín inició el proceso de formación de conductores de transporte público individual y colectivo para la prevención del acoso y la violencia sexual en la prestación del servicio con enfoque de género.
La meta es que al finalizar el año, 500 transportadores adquieran nuevas actitudes y comportamientos hacia la seguridad de las mujeres y las niñas.
“Invitamos a los conductores a dejar atrás conductas de acoso y violencia sexual que han sido naturalizadas y que intimidan a las mujeres, las hacen sentir incómodas y que desistan de utilizar el transporte público. Es eso lo que queremos transformar: anticiparnos a los hechos de violencia y prevenir, de manera que sigamos avanzando hacia espacios públicos más seguros para las mujeres y las niñas”, dijo la secretaria de las Mujeres, Juliana Martínez Londoño.
El proceso busca atenuar los riesgos que ellas enfrentan en sus desplazamientos, además de disminuir las sensaciones de peligro, temor e incertidumbre.
Estas acciones hacen parte de las estrategias de Espacios Públicos Seguros para las Mujeres y las Niñas en las comunas Popular, Santa Cruz, Manrique, Villa Hermosa, La Candelaria y el corregimiento Altavista. Hasta ahora, se han capacitado 2.180 personas y se espera llegar a 4.500.
“El transporte público es la columna vertebral de la movilidad y queremos que a través de este proceso los conductores se conviertan en garantes de la percepción de seguridad”, expresó el secretario de Movilidad, Carlos Cadena Gaitán.
