Las autoridades colombianas confirmaron este viernes que cinco personas murieron en enfrentamientos entre bandas criminales en el municipio de Jamundí (suroeste) luego de que la comunidad denunciara que un grupo armado ingreso a una zona rural de la región anoche.
«Hubo cinco bajas, dos vehículos incinerados y uno afectado por artefacto explosivo, estamos en investigaciones. Ya hay unidades, 230 militares controlando la zona», afirmó a periodistas Andrés Felipe Ramírez, alcalde de Jamundí, municipio del departamento del Valle del Cauca.
El funcionario precisó que los fallecidos «no hacen parte de Jamundí» y que el enfrentamiento se dio por la lucha entre bandas por «controlar el territorio», entre ellas las formadas por disidencias de las FARC.
«Tenemos cerca de 1.000 hectáreas de cultivos ilícitos y nosotros pedimos al Gobierno Nacional que Jamundí sea incluido en una zona estratégica de intervención integral. No podemos seguir a espaldas de esta problemática», añadió.
Momentos antes, la Alcaldía de Jamundí informó que estaba verificando la información recibida por la comunidad de que «un grupo armado ingresó a la zona sobre las 11.00 p.m. (04.00 GMT de este viernes) en motocicletas en La Meseta».
En la zona en donde ocurrió el enfrentamiento hay presencia de las disidencias de las FARC, bandas de delincuencia común y narcotraficantes.
El Valle del Cauca, el Cauca y Nariño, los departamentos del suroeste de Colombia, son tres de las regiones que tienen más hectáreas sembradas de coca, lo que genera violencia porque los grupos ilegales buscan controlar las rutas para sacar la cocaína a mercados del exterior.
Los cultivos de marihuana también están en estos departamentos y de allí los narcotraficantes hacen envíos por tierra para comercializarla en Bogotá y otras zonas del centro del país.
El pasado 18 de octubre, la Policía reportó el asesinato de cuatro personas en una zona rural de Jamundí.
Los cuatro cuerpos fueron hallados a la entrada de una finca del caserío Guachinte.
EFE