Congresistas colombianos apoyan a Cuba ante el ingreso en la lista negra de EE.UU.

Bogotá, 13 enero- Una veintena de congresistas de varias bancadas de Colombia mostraron, en una carta formal enviada este miércoles al presidente Iván Duque, su respaldo a Cuba por su «rol fundamental» en los procesos de paz y ante la decisión de EE.UU. de volver a considerar a la isla como país patrocinador del terrorismo.

«En los momentos de crisis y de peligro de rompimiento de esos procesos, Cuba ha jugado un papel esencial para subsanar los problemas», explican diversos congresistas, entre los que figuran el senador de Polo Democrático Iván Cepeda, y otros políticos de movimientos de izquierdas o centro como el Partido de la U, la Alianza Verde, la FARC o el Liberal.

A ocho días de finalizar el mandato del presidente Donald Trump, la Administración estadounidense decidió reincorporar a Cuba a la lista de Estados patrocinadores del terrorismo de la que había sido retirada en 2015 por el Gobierno de Barack Obama (2009-2017).

Entre las razones, como indican los congresistas en su carta al presidente colombiano, Iván Duque, figura la permanencia de miembros de la delegación de paz del grupo guerrillero colombiano Ejército de Liberación Nacional (ELN) en Cuba.

«Cabe recordar que esa presencia fue solicitada por el Estado colombiano», inciden los representantes parlamentarios, que aprovechan la ocasión para pedirle al Gobierno que retome el proceso de paz con el ELN.

«De esta forma, Colombia avanzaría en el logro de la paz total, y, al mismo tiempo, lanzaría un claro mensaje a la comunidad internacional sobre el significado de la valiosa contribución que ha hecho Cuba para poner fin al conflicto armado interno», concluye la misiva.

Cuba ingresó en la lista de Estados patrocinadores del terrorismo en 1982 y salió en mayo del 2015 como parte del proceso de normalización de relaciones bilaterales impulsado por Obama

LA NEGATIVA A EXTRADITAR AL ELN

El reingreso en la lista no tomó por sorpresa al Gobierno cubano y el mandatari, Miguel Díaz-Canel, calificó el movimiento de Trump como el «colmo del cinismo».

El secretario de Estado, Mike Pompeo, justificó la medida acusando al Gobierno cubano de haber «alimentado, alojado y brindado atención médica a asesinos, fabricantes de bombas y secuestradores, mientras muchos cubanos pasan hambre, no tienen hogar y no tienen medicinas básicas».

En concreto, aludió a la negativa del Ejecutivo cubano a extraditar a diez miembros del ELN que viajaron a La Habana para participar en negociaciones de paz con el Gobierno del país suramericano, y a los que Colombia reclama por un atentado en Bogotá que en enero de 2019 mató a 22 personas e hirió a más de 87.

Cuba, país garante de los diálogos de paz, ha rechazado reiteradamente esta solicitud, al considerar que supondría una violación de los protocolos internacionales que amparan las negociaciones.

El regreso a la lista de patrocinadores del terrorismo supone la imposición de nuevas sanciones que en la práctica ya pesaban sobre el país caribeño debido al embargo comercial y financiero que EE.UU. mantiene desde hace seis décadas sobre la isla.

El presidente electo de EE.UU., Joe Biden ha prometido descongelar el proceso de acercamiento impulsado por Obama y revertir -aún no se ha precisado si en parte o en su totalidad- las sanciones impuestas por Trump en los últimos cuatro años.