Madrid, 29 diciembre.- El delantero hispano-brasileño Diego Costa ya no jugará más para el Atlético de Madrid, con el que firmó este lunes su rescisión de contrato, que terminaba el 30 de junio, y completó su marcha del club rojiblanco, con el que deslumbró en 2013-14 y al que regresó con mucho menos brillo desde septiembre de 2017.
El domingo hizo su solicitud de rescindir su contrato por motivos personales; el lunes por la mañana sus abogados conocieron las condiciones del club para su salida libre, entre ellas que si ficha por cualquier posible rival directo del Atlético en la Liga de Campeones o en LaLiga Santander de esta temporada habría una indemnización por traspaso y por la tarde no hubo entendimiento. Esta mañana, con el tercer día consecutivo sin entrenarse de Diego Costa con el equipo, todo quedó zanjado con el acuerdo final.
«El Atlético de Madrid y Diego Costa han llegado a un acuerdo para la rescisión del contrato del delantero (…). El jugador hispano-brasileño solicitó al club su desvinculación por motivos personales hace unos días y firmó este martes la rescisión de su contrato, quedando desligado de nuestra entidad», anunció el club al filo de las 13.00 horas en un comunicado en su página web oficial.
«Queremos ayudar a Diego como se ha ayudado en su salida y, obviamente, no nos queremos perjudicar en lo que nos atañe a la competitividad. La gente que trabaja dentro del club, en la firma de su salida, habrá puesto en su consideración todo esto para generar un equilibrio entre una salida y el bienestar del club», expuso, por su parte, Diego Simeone en la rueda de prensa telemática posterior.
«Ustedes saben lo que queremos a Diego. Tenemos un montón de tiempo pasado juntos de la mejor manera, donde nos dimos mucho tanto él para nosotros como nosotros hacia él. Hemos hablado con él. Él tiene también la necesidad de encontrar nuevos desafíos, porque está bien, fuerte y en un buen momento», continuó.
El pasado octubre, hasta que concluyó un mercado de verano de duración extraordinaria por la COVID-19, el atacante estuvo a la venta, entre los hombres a los que el club pretendía dar una salida. Finalmente se quedó en el Atlético, aunque la prolongación de la aventura sólo se ha alargado tres meses, según algunas fuentes por cuestiones familiares, aunque otras hablan de motivos deportivos.
Realmente, es el fin anticipado de su carrera en el Atlético que ya tenía fecha máxima: el 30 de junio de 2021, el momento en el que concluía el contrato del ’19’, que se va del equipo muy lejos de los números que promedió en su primera etapa, más distante aún del impacto de entonces y sin la transcendencia que tuvo en el pasado sobre el terreno de juego, aunque sí con mucha ascendencia interna, como un hombre indudablemente importante del vestuario rojiblanco.
Por primera vez desde su crecimiento al lado de Simeone, Diego Costa no era el titular número uno en la delantera del esquema del técnico argentino. La primera elección era Luis Suárez, aunque también han compartido ataque una vez: en la sexta jornada de la Liga frente al Celta, pero justo se lesionó en ese duelo Costa.
La duda es cuál será su próximo destino. A sus 32 años, cumplidos el pasado 7 de octubre, aún tiene recorrido competitivo fuera del Atlético, del que se despide con cinco títulos: tres en su primera etapa (la Supercopa de Europa de 2012, la Copa del Rey de 2012-13 y la Liga de 2013-14) y dos en la segunda.
Pero el atacante hispano-brasileño pone fin a una segunda etapa por debajo de las expectativas. Es cierto que ha ganado una Liga Europa y una Supercopa de Europa, las dos en 2018 y la segunda como futbolista decisivo contra el Real Madrid en Tallin, con dos goles y como el mejor hombre del partido, pero también que su fútbol, sus goles, su impacto y sus números son mucho menos de los esperados, también porque las lesiones han marcado su regreso al Atlético.
19 GOLES EN 81 PARTIDOS DESDE SU REGRESO EN 2017
La vuelta en septiembre de 2017 de Diego Costa se resume en 81 partidos, 19 goles, 12 asistencias… y 70 encuentros de baja, bien por lesiones (58), como la operación del quinto metatarsiano del pie derecho en 2018-19, la intervención de una hernia discal cervical la pasada campaña, varias dolencias musculares o la trombosis venosa en la pierna derecha, o bien por sanciones: doce choques.
En su primera era en el Atlético, al principio con las cesiones al Albacete y el Celta, más el traspaso y la recompra al Valladolid, Diego Costa se ganó instante a instante pasar a la historia del club. En 2010-11 irrumpió en el equipo; en 2011-12 se lesionó y fue cedido un semestre al Rayo Vallecano y en 2012-13 y 2013-14 se encontró con Diego Simeone, que sacó todo su potencial.
En ese periodo jugó 134 partidos y marcó 64 goles. A las órdenes del técnico argentino en ese momento fueron 96 encuentros entre 2012-13 (44) y 2013-14 (51), 85 de titular, y 56 goles: 36 fueron en 2013-14, cuando lideró el título de la Liga para el Atlético y el pase a la final de la Liga de Campeones, y 20 en 2012-13, cuando su equipo fue campeón de la Copa del Rey ante el Real Madrid por 1-2.
Tres años después de pagar 60 millones de euros al Chelsea por su traspaso, sale del Atlético, con el que tenía contrato hasta junio de 2021 y del que se va con 83 goles en 215 encuentros, 168 como titular, además de los cinco citados títulos.
Entre ambas etapas, Diego Costa jugó tres años en el Chelsea, que pagó 38 millones de euros por él en el verano de 2014. Allí jugó 120 encuentros oficiales, marcó 59 goles, dio 19 asistencias a sus compañeros y logró dos títulos de la ‘Premier League’.