Kiev/Moscú, 24 de octubre de 2023.- Las tropas ucranianas y rusas continúan enzarzadas, cuando se cumplen hoy veinte meses de guerra, en cruentos combates en las inmediaciones de la ciudad de Donetsk en un intento de mejorar sus posiciones antes de que las bajas temperaturas congelen ese sector del frente.
El Estado Mayor General ucraniano ha reconocido que Rusia ha pasado a la ofensiva en los frentes del este y el noreste, y lanza constantes ataques para ganar terreno cerca de las localidades ucranianas de Avdivka, Márinka, junto a Donetsk, y Kúpiansk, en la región de Járkov.
Más de 400.000 soldados rusos en Ucrania, según Kiev
«Tienen suficientes tropas para (llevar a cabo) operaciones diferentes en diversos sectores del frente», afirmó el portavoz de la inteligencia militar ucraniana (GUR), Andrí Yusov, que cifró en más 400.000 hombres los efectivos desplegados por Rusia en los territorios ocupados.
En declaraciones al canal de televisión Kyiv TV, Yúsov advirtió de que pese a ese considerable número de soldados, el mando militar ruso continúa enviando armamento y movilizando personal para reforzar sus tropas en Ucrania.
Ante esta situación, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, urgió hoy a la comunidad internacional a seguir suministrando armamento para que su país se defienda de la agresión rusa y subrayó que de esa ayuda depende «la seguridad a largo plazo» de Europa.
Ucrania pide el máximo de armas y de munición
En una intervención por teleconferencia durante la Plataforma Internacional de Crimea, cuya segunda cumbre parlamentaria se celebra estos días en Praga, el mandatario pidió «el máximo de armas y el máximo de munición para poder prevalecer y ganar».
«Tenemos una enorme carencia de munición no sólo en Ucrania sino en todo el mundo», admitió el primer ministro ucraniano, Denís Shmigal, en una entrevista con el diario Financial Times, en la que destacó la necesidad de incrementar la producción nacional.
Al respecto, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó hoy que «el potencial del Occidente colectivo para producir munición es limitado y se necesita no poco tiempo para movilizar los recursos con el fin de aumentar ese potencial», al comentar las declaraciones de Shmigal.
Mientras, según cálculos del jefe del Centro de Inteligencia de las Fuerzas de Defensa Estonias, el coronel Ants Kiviselg, a Rusia le quedan en sus arsenales unos 4 millones de proyectiles de artillería, que le bastarían a sus tropas para un año de «guerra de baja intensidad».
A ello, de acuerdo con el estadounidense Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), que cita fuentes occidentales y imágenes de satélites, habría que sumar la munición suministrada a Moscú por Corea del Norte.
Pero incluso así, destacó el analista militar ucraniano Petró Chernik, ha disminuido considerablemente la intensidad del fuego de artillería ruso, ya que actualmente dispara entre 10.000 y 15.000 proyectiles diarios mientras que el verano del año pasado disparaban entre 45.000 y 80.000 diarios.
Acciones militares también en el sur y junto a Crimea
Si bien los combates más encarnizados se libran en los frentes oriental y nororiental, también se registraron acciones militares en el sur y junto a la anexionada península de Crimea.
Al menos 22 militares ucranianos murieron al intentar desembarcar en la margen izquierda del río Dniéper, aseguró hoy la administración instalada por Rusia en la región de Jersón, que añadió que las tropas rusas destruyeron cuatro lanchas enemigas
En la región de Jersón los rusos controlan la margen izquierda (sur) mientras que la derecha, incluida la capital regional, se encuentra bajo el control de la fuerza ucranianas.
La Armada rusa informó el martes de que repelió esta madrugada un nuevo ataque de drones navales ucranianos en la zona norte del Mar Negro, cerca de la bahía crimea de Sebastopol.
Según el departamento castrense, los drones fueron destruidos con misiles.
Los drones navales ucranianos, que a mediados de julio dañaron el puente de Crimea, que une la anexionada península con la Rusia continental, suponen una amenaza para la superioridad naval rusa y estarían obligando a la Flota del Mar Negro a abandonar Sebastopol y trasladar sus bases a puertos más alejados.
EFE