La Habana, 5 octubre.– Cuba sumó este lunes otros 36 casos de coronavirus y una persona fallecida para un acumulado de 5.845 diagnosticados y 123 decesos desde que llegó en marzo la pandemia de COVID-19 al país caribeño, según las estadísticas actualizadas por el Ministerio de Salud Pública (Minsap).
Con 7 nuevos casos, La Habana muestra una tendencia hacia el control de la segunda ola de contagios, que había provocado una tensa situación epidemiológica en la ciudad en los últimos dos meses.
La aplicación de medidas más rigurosas durante el mes de septiembre -que incluyeron un inédito toque de queda nocturno, la suspensión del transporte público y del curso escolar en la urbe cubana- resultó efectiva para las autoridades habaneras, que decidieron suavizar algunas restricciones desde la pasada semana.
No obstante, han insistido en aclarar que la provincia capital -la zona más poblada de Cuba con 2,1 millones de habitantes- permanece en fase de «transmisión autóctona limitada», en la que todavía rigen ciertas medidas con el fin de contener definitivamente la propagación de la enfermedad.
En ese sentido, el director de Epidemiología del Minsap, Francisco Durán, insistió en su comparecencia televisada de esta jornada en la importancia de cumplir las disposiciones sanitarias ante el riesgo que supone la circulación del coronavirus.
En los últimos días en la provincia central Sancti Spíritus ha surgido un rebrote que la víspera elevó a 23 las nuevas infecciones, 15 de ellas en el municipio cabecera homónimo, donde se concentra el mayor número de casos, y otros ocho fueron confirmados en la ciudad turística de Trinidad.
Su vecina Ciego de Ávila (centro-norte) registró hoy sólo tres nuevos contagios, una discreta disminución tras mantener una compleja situación durante varias semanas por la aparición de varios eventos de trasmisión local dispersos en su territorio.
De los 36 cubanos confirmados ayer a través de 7.334 pruebas PCR, hay uno de la provincia Artemisa (oeste) y otros dos detectados en Villa Clara (centro), con lo que esa provincia rompe una cadena de más 35 días sin infección.
Según el reporte de las autoridades sanitarias, 433 personas están ingresadas en Villa Clara, de ellas 15 en hospitales e instituciones de atención a enfermos de bajo riesgo y el resto en centros de aislamiento.
Como indicador favorable, el epidemiólogo Durán resaltó el alta médica que recibieron 87 pacientes ayer para un total de 5.232 personas recuperadas, el 89,5% de los enfermos diagnosticados.
Además, recalcó que siete de las 15 provincias cubanas y el municipio especial Isla de la Juventud desde hace más de dos semanas no registran ningún caso de la enfermedad.
Esta semana comienza con 488 pacientes activos, 487 de ellos con evolución estable y uno se reporta grave.
Después de varias jornadas sin muertes, tras permanecer varios días en estado crítico falleció este domingo una mujer de 70 años residente en la provincia de Matanzas (oeste), que tenía antecedentes patológicos de enfermedad pulmonar obstructiva crónica y era fumadora.
Cuba se recupera de la segunda oleada de la COVID-19, que ha generado más de 2.500 casos positivos en los pasados dos meses, con un pico de la epidemia identificado el día 9 de agosto, con 93 pacientes.
EFE
