Ciudad de México, 10 mar – La escritora Dahlia de la Cerda ha recordado a su mejor amiga y víctima de feminicidio en ‘Perras de Reserva’ (2022), libro de relatos preseleccionado al Booker Internacional 2025, porque fue ella quien le dijo: ‘Tú si te pones las pilas nos vas a sacar de la pobreza’”, confiesa este lunes la mexicana en entrevista con EFE.
“Yo confío en ti, escribe de tus vivencias, de lo que hemos pasado en nuestra adolescencia, me repetía”, afirma la autora al recordar a Claudia, esa amiga que le fue arrebatada por la violencia machista y que ahora vive en ‘La Huesera’, un cuento que se incluye en ‘Reservoir bitches’ (2024), y uno de los trece libros preseleccionados por el jurado del prestigioso certamen literario británico.
Sobre este anuncio, De la Cerda, antes vendedora de productos de Avon, ropa de segunda mano y rosas negras en los tianguis, dispara con sinceridad: “Creo que ni ella (Claudia) pensaba que yo iba a llegar tan lejos” y menos escribiendo “sobre la violencia hacia las mujeres”.
Con estos cuentos crudos, describe en primera persona que las mujeres también sobreviven a la violencia, aunque eso signifique aprenderla, sufrirla y ejercerla, así como el personaje de Yuliana que está dispuesta a todo para hacer justicia a su amiga asesinada o la de una hija que se encomienda al diablo para proveer de lo mínimo a su familia.
“Cuando planteé este proyecto en 2013 me decían que eso no era literatura que eso era de sociología, que escribiera de algo universal como el amor o el fracaso, porque nadie iba a querer leer sobre la violencia hacia las mujeres, algo que, mencionaban, se lee en los periódicos y no en la literatura”, explica la escritora de 40 años.
Entonces, reconoce, hubo muchos “no”.
Hasta de su familia que “no les gusta lo que escribo por exponerme tanto”, pero el “sí se abrió cuando Selva Almada, una autora argentina con prestigio publicó ‘Chicas muertas’ (2014), ahí ‘Perras de Reserva’ se convirtió en una creación viable para los jurados”.
A pesar de que este libro es de los más vendidos de la editorial Sexto Piso y ahora es preseleccionado al Premio Booker, la también activista aclara que mucha gente desearía censurarlo, pues creen que es “basura” y “una apología a la violencia”.
El clasismo no solo es dinero
Más allá del odio y la discriminación, a De la Cerda le gusta incomodar cantándole “a los suyos, a su barrio”.
Para la originaria de Aguascalientes (centro de México) es “poderosísimo que la gente se represente” con sus versos, que las maestras de las escuelas y de las prisiones le manden dibujos de sus alumnos incrustados en la piel de las ‘Perras de Reserva’ o que a un ‘morrito (joven)’ le llame la atención leer “porque sienta que le hablan a él, a su contexto”.
Estos últimos años de “suerte” no han sido fáciles, detalla, “porque yo en el barrio ya no encajo, la gente ya no me trata igual, aunque ganen más dinero».
«Porque no solo es el dinero, es la mudanza de clase y eso no solo tiene que ver con dinero, sino con una cuestión de estatus, a mí ya me ven como la celebridad literaria no como parte de ellos”, asegura.
Sin miedo a nada, Dahlia de la Cerda revela que como escritora “no es feliz, pero tampoco quiere serlo sobre todo en una escena tan tóxica como la ‘mexa’”, incluso habla de su “pronto retiro” o de un largo “descanso de la vorágine”.
EFE