Denuncia artística en Gaza: ‘Pósteres para Gaza’ expone el sufrimiento palestino

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La artista palestina Vera Tamari posa junto a su obra en la exposición Pósteres de Gaza, inaugurada el 3 de noviembre de 2024 en el centro cultural Khalil Sakakini de Ramala (Cisjordania). EFE/ Alejandro Ernesto

Ramala, 4 nov- «Me gustó mucho la idea de hacer una exposición de pósteres porque es un formato que te exige lanzar un mensaje al mundo, y en este caso, el mensaje es contra las atrocidades y el genocidio de Israel en Gaza», cuenta a EFE la veterana artista palestina Vera Tamari desde su ciudad natal de Ramala, en la Cisjordania ocupada.

Tamari es una de las artistas palestinas, de un total de 26, cuyas obras aglutina la exposición ‘Pósteres para Gaza’, la cual tras pasar por Washington y Dubái llega ahora a la ciudad cisjordana de Ramala, donde estará expuesta hasta el próximo 4 de diciembre en el centro cultural Khalil Sakakini.

Esta iniciativa, según explica a EFE la coordinadora del proyecto, Sara Naba, es una colaboración conjunta entre el centro cultural Zaweyh Gallery de Dubai y el de Khalil Sakakini de Ramala con el objetivo de destinar el dinero recaudado por la venta de los pósteres a una devastada Franja de Gaza, donde los bombardeos israelíes no cesan más de un año después del inicio de la guerra.

«Los pósteres son simples y van directos al grano de lo que los artistas quieren contar. Además, fueron muy importantes durante la Primera y Segunda Intifada para la causa palestina. Detrás de estas piezas se encuentran autores palestinos que todavía tienen familia en Gaza, otros que viven en Cisjordania y otros que están en la diáspora», detalla Naba.

 Mensajes de denuncia

Esa contundencia de la que habla Naba puede leerse en pósteres que dicen ‘todo pasa, pero no todo se puede olvidar’, ‘parad el genocidio’, ‘no todos los derechos están garantizados’, o el póster del único artista libanés de esta exposición, Jaled el Haber, quien irónicamente se pregunta usando la imagen de un bombardeo: ‘Yo estoy bien Gaza, ¿qué tal tú?’

El póster de Tamari, de estilo más abstracto, refleja la dolorosa realidad instalada en el enclave tras más de un año de guerra y más de 43.000 muertos; pero al mismo tiempo abre una puerta a la esperanza.

«No me gusta explicar el significado de mi póster porque cada persona hace una interpretación diferente y eso me parece muy interesante. Pero sí quiero pensar que hay un espacio para la esperanza, por eso en la parte inferior vemos ese negro oscuro y en la parte de arriba hay más color. Aunque sé que necesitaremos décadas para reconstruir la Franja», lamenta.

El artista palestino Bashar Jalaf también quiere exponer la fragilidad de la vida en la Franja en su póster, inundado de flores amenazadas por balas. «Esta exposición no tiene un fin estético sino, sobre todo, político y humanitario. Queremos expresar el dolor y la muerte en Gaza a través de nuestro arte», sentencia Jalaf.

Preguntado sobre si sienten miedo de que Israel tome algún tipo de represalia contra ellos por esta piezas artísticas, Jalaf se muestra convencido en seguir usando su arte para denunciar las masacres de Israel.

Un sentimiento compartido por la artista Tamari: «Siento que los palestinos tienen esa energía para superar los problemas y sobrevivir. Confío en mi gente. Tenemos gente maravillosa: intelectuales, artistas, pensadores y científicos… están por todas partes del mundo pero comparten una misma solidaridad».

Eso sí, Sara Naba reconoce que trasladar esta exposición al este de Jerusalén, ocupado y territorio anexionado por Israel de forma unilateral, sería imposible. «Aquí en Ramala no hay problema, pero Israel prácticamente prohíbe todas las actividades culturales en Jerusalén, como proyecciones o exhibiciones, que cuestionan su ofensiva en la Franja de Gaza», agrega.

Por eso, visitantes como Román, un francés que trabaja y vive en Jerusalén, se ha desplazado hasta Ramala para poder ver la galería. «Considero importante ver lo que los artistas palestinos están haciendo en este momento. Al final el arte es uno de los espacios en los que pueden expresarse con mayor libertad», señala.

Núria Garrido

EFE