Denuncian que Ejército se hospeda en resguardo indígena de Jaidukamá, de Ituango, Antioquia

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La Organización Indígena de Antioquia, OIA, denuncia, rechaza y repudia en un comunicado la presencia de tropas del Ejército Nacional en el resguardo Indígena Embera Eyábida Jaidukamá, del municipio de Ituango, Norte de Antioquia, lo que “pone en alto riesgo a las familias indígenas que allí habitan”.

Es así como el Consejo de Gobierno Mayor de la O.I.A, a través del Sistema de Alertas Tempranas de la Consejería de Derechos Humanos y Paz, pudo constatar que desde el pasado 14 de abril permanece cerca a la escuela indígena una tropa del Ejercito Nacional, convirtiendo en objetivo militar a las comunidades y familias indígenas por un posible enfrentamiento armado.

Las tropas habrían exigido hace 3 días (22 de abril), el desalojo de 11 viviendas obligando a que 35 personas, entre ellos 12 niños y niñas, permanezcan en situación de confinamiento en la escuela, sin garantías ni respeto por sus vidas.

La OIA le reitera a los organismos del Estado que “los territorios indígenas son de paz y que la presencia de cualquier grupo armado legal e ilegal desequilibra la armonía de los territorios y amenaza con el buen vivir de los pueblos indígenas, victimas históricas del conflicto armado y el Estado Colombiano”.

Asimismo, hacen un llamado público a las fuerzas armadas del país, quienes en el último mes de manera inconsulta, “han hecho tránsito indiscriminado por varios territorios indígenas de Antioquia, violando tratados internacionales que buscan salvaguardar la vida y garantizar el cumplimiento por el respeto a los derechos humanos, el derecho fundamental a la Consulta Previa Libre e Informada y, además, el derecho a la autonomía, del que gozamos las comunidades en Colombia”.

Finalmente, a través del comunicado exigen a los actores armados, tanto legales como ilegales, que no transiten y no circulen por sus resguardos, “a que no usen a las comunidades como escudo humano, a respetar el derecho internacional humanitario y a respetar el principio de distinción común a los protocolos de Ginebra”.