Bogotá, Colombia, 4 diciembre de 2024.- La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos alertó este miércoles de la situación que se vive en el departamento colombiano de Arauca, fronterizo con Venezuela, donde en lo que va de año han documentado 15 homicidios de defensores de derechos humanos, 51 desaparecidos y 42 niños o niñas reclutados.
De los 15 homicidios, 12 eran líderes comunales y uno era un sabedor mayor indígena del pueblo hitnü, por lo que la representante en Colombia del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Juliette de Rivero, subrayó «la extrema vulnerabilidad de los pueblos indígenas hitnü y makagüan que se encuentran en riesgo de extinción física y cultural, de acuerdo con la Corte Constitucional».
«Documentamos que de los 42 niños que sufrieron reclutamiento forzado o uso o utilización, 32 pertenecen a los pueblos hitnü y makagüan. Esto pone en evidencia las graves consecuencias del conflicto sobre los pueblos indígenas, y también la urgencia de que el Gobierno, a nivel local y nacional, garantice los derechos humanos en estas zonas del país», añadió de Rivero.
Además, en 2024 se han producido 151 privaciones de la libertad por parte de grupos armados no estatales, con 51 personas que continúan desaparecidas.
También ha habido alteraciones en el acceso a la educación, con interrupciones de clases por enfrentamientos entre grupos armados, desplazamientos forzados, confinamientos y el uso de las escuelas por parte de esos grupos.
Así, según datos gubernamentales, 290 sedes educativas han sido afectadas por el conflicto en este departamento desde 2022.
«La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos llama a las autoridades del Estado a tomar medidas eficaces de prevención y protección para garantizar la vida y la labor de las personas defensoras de derechos humanos y de la población civil, con un énfasis especial en la garantía de la vida y la pervivencia de los pueblos indígenas hitnü y makagüan», pidió la oficina de la ONU en un comunicado.
El departamento de Arauca es el principal bastión de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), pero también hay presencia de otros grupos como disidencias de las FARC, lo que ha provocado luchas territoriales, amenazas y ataques a la población.
EFE