La Fiscalía, a través de los grupos de policía judicial de la Delegada contra la Criminalidad Organizada, recibió información sobre la ubicación de un lugar en zona rural de Buenaventura, en el que se construían semisumergibles al servicio del narcotráfico.
Las verificaciones se hicieron en un afluente del río Naya, en el corregimiento de Puerto Merizalde. En el sitio, los investigadores de la Fiscalía y tropas del Batallón contra el Narcotráfico N°2 del Ejército Nacional encontraron un astillero, maquinaria, motores diesel, plantas de energía, baterías y una cantidad importante de ACPM.
En fabricación estaba un semisumergible de 30 metros de largo por 3 metros de ancho, con capacidad para almacenar hasta 8 toneladas de clorhidrato de cocaína. El artefacto estaba listo para ser cargado con estupefacientes y salir desde las costas del Pacífico colombiano.
Un fiscal de la Dirección Especializada contra el Narcotráfico logró la legalización y judicialización de las diligencias y los elementos encontrados, en diligencias realizadas ante un juez de Buenaventura.