La disputa arancelaria que tienen Colombia y Panamá, principal tema de discordia entre ambos países, pasó este miércoles desapercibida durante la primera visita oficial que hizo a Bogotá el presidente Laurentino Cortizo.
Ni el mandatario panameño ni el presidente colombiano, Iván Duque, se refirieron directamente a esas disputas que surgieron en años recientes por los aranceles que Colombia aplica a las reexportaciones de textiles y calzados desde la Zona Libre de Colón (ZLC), y optaron por destacar los vínculos de amistad y el interés en fortalecerlos.
«Nuestra relación con el Gobierno del presidente Duque es fluida, es de respeto de dos vías y nuestros problemas -que tenemos muchas más similitudes, muchas más coincidencias- (…) los vamos a resolver de manera bilateral como debe hacerse entre muy buenos vecinos», afirmó Cortizo en una declaración conjunta con Duque.
El conflicto por los aranceles llegó a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y ha impedido de momento que Panamá ratifique un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia, indispensable para que el istmo pueda hacer parte de la Alianza del Pacífico.
FORTALECER EL COMERCIO
Pese a que no hablaron de disputas comerciales, los jefes de Estado se comprometieron a revisar y profundizar los «rubros cubiertos por el actual acuerdo comercial de alcance parcial, vigente entre ambos países», según afirmaron en un comunicado conjunto.
El objetivo, explicaron, es buscar «puntos de encuentro mutuamente beneficiosos» para fortalecer el comercio bilateral.
«Resalto lo que dice el comunicado de avanzar a través del establecimiento de un acuerdo parcial para que tengamos más comercio, pero celebro también que esto se hace en el marco de hablar de temas también novedosos», apuntó Duque.
También destacó el impulso que buscan darle ambos países a la «inversión importante de empresas panameñas en Colombia» y de «empresas colombianas en Panamá».
Después de Estados Unidos, Colombia es el segundo país con más inversión extranjera directa en Panamá, con 8.066 millones de dólares en 2017, según datos oficiales.
SEGURIDAD FRONTERIZA
Duque y Cortizo coincidieron en que es necesario fortalecer los controles en los 266 kilómetros de frontera terrestre que Colombia y Panamá comparten en el Tapón del Darién, donde operan bandas criminales como el Clan del Golfo, grupo heredero del paramilitarismo dedicado principalmente al narcotráfico, la extorsión y la minería ilegal.
El Darién, que es el único punto del continente donde se interrumpe la carretera Panamericana, es un territorio inhóspito y es usado por el crimen organizado también para el tráfico de migrantes.
«Queremos tener las comisiones binacionales de frontera no solamente activadas sino mejores puestos y mecanismos de control fronterizo, mucho más cuando hemos visto que hay mafias de tráfico de personas que han tratado de acechar la zona limítrofe y tenemos que ser efectivos en esos propósitos», manifestó Duque.
Es por ello que firmaron un memorando de entendimiento sobre cooperación bilateral para fortalecer los controles, que consideran fundamentales para la seguridad.
IMPULSO A LA CULTURA PANAMEÑA
El Gobierno de Colombia se comprometió a apoyar el fortalecimiento del Ministerio de Cultura de Panamá, que fue creado en agosto pasado y sustituyó luego de 45 años al Instituto Nacional de Cultura (Inac).
Para hacerlo se realizarán visitas de expertos y ponencias sobre industrias creativas y artesanías, y además se implementará un plan piloto para la protección del patrimonio panameño en el área de Portobelo y su transformación en un polo de desarrollo turístico.
«Panamá ha tomado una decisión importante (…) de tener un Ministerio de Cultura, que mira hacia la cultura y el patrimonio, pero también hacia las industrias creativas. Ahí hay un gran frente de cooperación», valoró Duque.
GABINETE BINACIONAL
Colombia y Panamá acordaron establecer un Gabinete Binacional, que desde ahora será el «más alto mecanismo de relacionamiento, diálogo político y coordinación de políticas públicas entre ambos países», según la declaración conjunta suscrita en la Casa de Nariño, sede del Gobierno colombiano.
El objetivo es que, según detalló Duque, a través de indicadores y cumplimiento de metas en distintos sectores ambos mandatarios evalúen como se está aportando al afianzamiento de las relaciones bilaterales.
«Se marca un hito en la relación bilateral con la conformación del Gabinete Binacional», apostilló el presidente colombiano sobre ese mecanismo que su país ya tiene con vecinos como Ecuador y Perú.
EFE
