Antioquia, Colombia, 7 septiembre de 2024.- En un violento ataque que ha captado la atención internacional, dos ciudadanos peruanos fueron asesinados a tiros en el barrio San Vicente del municipio de Guarne, Antioquia. Uno de ellos, Josué Oliver Blas Lezama, alias «Gato Coté», era un cabecilla de la organización criminal peruana «La Gran Alianza», dedicada a la minería ilegal y otras actividades delictivas. Las autoridades colombianas y peruanas ya han iniciado una investigación conjunta para esclarecer los hechos y determinar las implicaciones transnacionales de este crimen.
El asesinado jefe de «La Gran Alianza» también era conocido dentro del mundo criminal con los alias de El Viejo, Gato Cote, Gato Lezama, Gato Blas, Doctor, Don Cote y Don Gato.
Alias «Gato Cote» era un fugitivo buscado por la Policía Nacional del Perú debido a su papel como líder de «La Gran Alianza», una red criminal que operaba principalmente en la región de La Libertad, donde acumuló una fortuna estimada en más de 80 millones de soles a través de la minería ilegal en la provincia de Pataz. Esta organización, bajo su mando, se destacó por su violencia y la sofisticación de sus operaciones ilegales, que incluían extorsión, tráfico de dinamita, asesinatos selectivos y lavado de oro mediante empresas fachada.
El ataque mortal ocurrió la noche del jueves, cuando Blas Lezama y otro ciudadano peruano, cuya identidad no ha sido revelada, al parecer sería uno de sus lugartenientes, fueron interceptados por varios sicarios que se desplazaban en motocicletas. Los agresores les dispararon a quemarropa mientras se encontraban en inmediaciones del sector conocido como Parqueadero El Triángulo, en San Vicente. Las víctimas fueron trasladadas de inmediato a un centro asistencial, pero Blas Lezama ingresó sin signos vitales, mientras que su acompañante falleció horas más tarde debido a la gravedad de las heridas.
Perfil de alias «Gato Coté» y la organización «La Gran Alianza»
Josué Oliver Blas Lezama, conocido en el bajo mundo como «Gato Coté», tenía un amplio prontuario criminal en Perú. Desde 2018, había liderado «La Gran Alianza», una banda que se expandió rápidamente gracias al control de socavones ilegales en la provincia de Pataz, donde robaban oro de empresas mineras legales como Poderosa. Bajo su mando, la organización implementó una red que no solo se dedicaba a la minería ilegal, sino que también operaba en extorsiones, tráfico de dinamita y homicidios. Según informes, lograron lavar grandes cantidades de oro a través de empresas fachada, disfrazando la actividad ilícita como minería informal.
Antes de asumir el liderazgo de «La Gran Alianza», Josué Oliver Blas Lezama, “Gato Cote” quien tenía 45 años de edad, estuvo detenido en el año 2019, tres años en el penal de Challapalca, fue acusado de liderar grupos criminales ‘Los Pulpos de la Cruz Verde’, Los Malditos del Triunfo, entre otros.
Al ser liberado, no solo se reincorporó al mundo criminal, sino que ascendió rápidamente, consolidándose como uno de los líderes más poderosos de la minería ilegal en Perú. Su vida estuvo marcada por la violencia y un estilo ostentoso, destacándose por su costumbre de criar perros de raza con collares de oro y otros lujos.
En mayo de este año, las autoridades peruanas lanzaron un operativo masivo contra «La Gran Alianza», incautando explosivos y arrestando a 14 miembros de la organización, incluido el hermano de Blas Lezama, Juan Manuel Blas Lezama, alias «Juancho». Sin embargo, «Gato Coté» logró escapar y refugiarse en Colombia, donde continuó con sus actividades ilícitas hasta su asesinato.
Operativo e investigación internacional
Tras el homicidio, la Policía Nacional de Colombia activó un operativo de búsqueda y logró incautar el vehículo utilizado por los sicarios para cometer el crimen. Según las primeras informaciones proporcionadas por las autoridades, el doble homicidio podría estar relacionado con un ajuste de cuentas entre estructuras armadas organizadas que se estarían disputando la subregión del Oriente antioqueño, organizaciones criminales que operan en la subregión y que podrían haber tenido vínculos con Blas Lezama debido a sus conexiones con el mundo del narcotráfico y la minería ilegal.
El general José Zavala Chumbiauca, jefe de la Región Policial La Libertad en Perú, confirmó que se han enviado las huellas dactilares de Blas Lezama a las autoridades colombianas para verificar su identidad, y un equipo especial de la Policía peruana está colaborando en la investigación. «Dentro de estas coordinaciones, hemos recibido la información de que Josué Oliver Blas Lezama fue asesinado en Colombia. Estamos enviando sus huellas dactilares para corroborar la identidad y continuar con la verificación del caso», señaló el alto oficial.
Zavala Chumbiauca agregó que Blas Lezama huyó a Colombia después del operativo realizado en mayo en Perú, donde su red criminal fue golpeada con múltiples incautaciones de explosivos, vehículos y la captura de sus colaboradores más cercanos. Este operativo había debilitado parcialmente a «La Gran Alianza», pero no logró detener del todo sus operaciones, ya que Blas Lezama logró reorganizar parte de la banda desde su refugio en Colombia.
Implicaciones del asesinato y el futuro de «La Gran Alianza»
El asesinato de alias «Gato Coté» en territorio colombiano abre nuevas interrogantes sobre el futuro de «La Gran Alianza» y la expansión de actividades delictivas transnacionales en la región. Este caso pone en evidencia los vínculos entre organizaciones criminales de Perú y Colombia, uno de los departamentos más apetecidos es Antioquia, y una de las subregiones donde más se asientan criminales de varios países del mundo es el Oriente antioqueño, «El Paraíso del crimen transnacional». Este crimen transnacional opera particularmente en sectores como la minería ilegal, el narcotráfico y la extorsión.
Las autoridades de ambos países han intensificado la cooperación para desmantelar las redes que quedaron activas tras la muerte de Blas Lezama, que aún mantienen influencia en la región de Pataz.
El Coronel Carlos Andrés Martínez, comandante de la Policía de Antioquia, confirmó que, durante el operativo de verificación, se incautaron más de 180 millones de pesos y varios vehículos con placas peruanas, lo que sugiere que Blas Lezama seguía operando en Colombia bajo una fachada de actividades comerciales. «Este es un golpe importante contra una estructura criminal internacional. Seguimos investigando para esclarecer las circunstancias de este ajuste de cuentas y dar con los responsables del crimen», indicó Martínez.
El viernes 6 de septiembre fue una jornada violenta en el Oriente Antioqueño, con cinco personas asesinadas en diferentes hechos, lo que ha encendido las alarmas entre las autoridades locales. El doble homicidio de los ciudadanos peruanos es solo uno de los eventos que marcaron un día caótico en la región.
A.U.