Cuatro personas murieron en dos ataques cometidos por presuntos sicarios a un domicilio particular y a un taller de motocicletas en Celaya.
Un tercer incidente fue evitado cuando agentes de la Guardia Nacional alcanzaron a llegar tras un reporte de que hombres armados pretendían forzar la puerta de una casa en otro rumbo de esa misma ciudad.
Uno de los embates armados ocurrió en un taller de reparación de motos en la calle Agapito de la colonia Emeteria Valencia, a cuyo interior fue lanzado un artefacto explosivo y se efectuaron disparos por parte de sujetos desconocidos.
Personal de Protección civil adscrito a la Secretaría de Seguridad Ciudadana acudió a sofocar el fuego.
Una vez que controlaron el siniestro, preventivos ingresaron al taller y encontraron a dos personas sin vida, por lo que dieron aviso a la Fiscalía General del Estado, mientras fue resguardo el lugar por elementos de la Guardia Nacional y la propia Policía Municipal.
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Más tarde, informó la Secretaría de Seguridad que recibió un llamado por el 911 avisando de otros disparos, esta vez en una casa de la calle Villa del Carbón, en la colonia El Romeral.
Esto ocurrió alrededor de la 1 la tarde, casi de manera simultánea al incendio provocado en el taller de motocicletas de la colonia Emeteria Valencia.
Algunos vecinos informaron a las autoridades que varios hombres habían llegado a la casa en dos vehículos, dispararon al inmueble y luego lanzaron una granada antes de huir del lugar.
Los Bomberos pudieron apagar el incendio desatado por el artefacto explosivo, pero dentro de la casa habían muerto dos personas.
En este domicilio, los agresores dejaron una cartulina con un mensaje adjudicado a un grupo de la delincuencia organizada.
Autoridades desmintieron versiones que circularon este sábado profusamente en redes y aplicaciones sobre otras agresiones armadas.
Aunque en un domicilio de la colonia Jacarandas se reportaron daños en una puerta tras ser forzada, pero los responsables ya no entraron porque en ese momento llegó al sitio personal de la Guardia Nacional.
Tomado de Revista Proceso
