A eso de las 11:50 p.m. del sábado 27 de enero se escuchó una fuerte explosión en el municipio de Santa Rosa, sur de Bolívar.
El acto terrorista esta vez tuvo como objetivo la estación de Policía de Buenavista, de esa localidad. Dos policías murieron y uno más resultó herido: el intendente Manuel Guillermo Galvis Contreras y el patrullero Ferney Alexander Posada Chavarría son las víctimas mortales, mientras que el patrullero José Rosemberg Rivas Mosquera resultó con heridas de gravedad.
El artefacto explosivo habría sido lanzado desde un vehículo en movimiento hacia un lote ubicado al costado de la estación e hizo que cayeran paredes y techo. También se escucharon disparos posterior a la detonación, dijeron vecinos del lugar.
En esa zona, según las autoridades, hace presencia el frente Guillermo Ariza del Eln. Las primeras hipótesis apuntan también a represalias por parte de bandas criminales dedicadas al narcotráfico y que han sido afectadas por la Policía en los últimos días. Sin embargo, ni la Fuerza Pública ni la Fiscalía ni aún el Gobierno tienen elementos para señalar por el momento a un autor de este hecho que enluta de nuevo a esa Institución.