Ecuador superó este domingo el medio centenar de fallecidos y ya son 57 los muertos por coronavirus, que ha contagiado a 1.890 personas, mientras que son 2.835 los casos sospechoso de haber contraído la enfermedad, informó el Ministerio de Salud Pública.
En las últimas horas se han registrado nueve decesos, lo que elevó la cifra desde los 48 que se reportaron el sábado, mientras que unas sesenta personas ingresaron al cuadro de positivos para COVID-19, según la última estadística oficial.
La provincia costera de Guayas (suroeste) sigue siendo, de largo, la más afectada con 1.376 casos, seguida de la andina de Pichincha con 171, la tropical de Los Ríos con 60, la austral de Azuay con 53 y Manabí con 46.
La amazónica de Napo es la única de las 24 provincias del país que, hasta el momento, no ha registrado ningún contagio y, de acuerdo la estadística, del total de positivos el 54 por ciento corresponde a pacientes masculinos.
De los contagiados, 1.596 pacientes presentan síntomas leves y se encuentran en cuarentena domiciliaria bajo vigilancia médica; otros 120 están «estables» en hospitales, y 114 también están en unidades especiales de atención con «pronóstico reservado».
En Ecuador rige un Estado de excepción y de aislamiento domiciliario masivo y obligatorio en todo el país para tratar de frenar la expansión del contagio del coronavirus.
Además, se ha aplicado un toque de queda de quince horas que va desde las dos de la tarde hasta las cinco de la mañana y rige también una restricción a la circulación de vehículos, con base en los últimos números de las matrículas de registro.
Las restricciones exceptúan a vehículos con salvoconducto que cumplen actividades básicas relacionadas con la atención de salud, seguridad, abastecimiento de alimentos, medicamentos y exportaciones.
También se ha regulado el ingreso de personas en horarios permitidos a supermercados y farmacias.
El pasado 11 de marzo el presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, decretó la emergencia sanitaria en todo el país para intentar frenar la expansión del contagio del coronavirus.
EFE
