Shanghái (China), 20 de febrero de 2025.- Estados Unidos tiene planeado reducir en un 10 % la plantilla de sus embajadas y consultados en China a partir de esta misma semana tras la orden del nuevo presidente, Donald Trump, de «optimizar la mano de obra» de la Administración, incluyendo al Departamento de Estado.
La información, trasladada por dos fuentes anónimas al diario hongkonés South China Morning Post, apunta que tanto diplomáticos estadounidenses trabajando en China continental y Hong Kong como empleados locales podrían recibir los avisos correspondientes a partir de este mismo viernes.
Una de esas fuentes califica de «considerable» esta reducción de plantilla, y apunta que probablemente se trata de la primera ocasión en la que EE.UU. reduce su equipo de emisarios en China desde que estableció lazos oficiales con ese país, en 1979.
Los despidos -se desconoce si los empleados serán reasignados a otras oficinas del servicio diplomático- afectarían a la embajada en Pekín y a los consulados en Cantón, Shanghái, Shenyang y Wuhan, así como en el de la región semiautónoma de Hong Kong.
Otra de las personas citadas en el artículo no enmarca la reducción de plantilla en la tensión entre Pekín y Washington, marcada por el temor a un recrudecimiento de la guerra comercial tras el regreso de Trump a la Casa Blanca, sino en las iniciativas del nuevo Gobierno para reducir el número de empleados públicos.
El Departamento de Estado indicó que está «cumpliendo totalmente» con esa nueva agenda: «Con arreglo a esto, el Departamento de Estado sigue evaluando nuestra posición global para garantizar que estamos en la mejor situación para afrontar los desafíos modernos en representación del pueblo estadounidense», afirmó una portavoz.
No obstante, la vocera agregó que, «por norma general, no comentamos sobre asuntos internos de personal».
Trump nominó como nuevo embajador en China al exsenador republicano David Perdue, un empresario con experiencia en Asia, que previsiblemente obtendrá el visto bueno del Senado para sustituir a Nicholas Burns, un diplomático de carrera que ocupó el cargo desde 2022 hasta principios de este año.
Actualmente, la legación estadounidense está dirigida por su nueva número dos, Sarah Beran, quien había sido asistente especial sobre asuntos sobre China para el personal del Consejo de Seguridad Nacional en la Casa Blanca.
EFE