- La Alcaldía de Medellín declaró la emergencia hospitalaria y responsabilizó al Gobierno Nacional. Gutiérrez invitó a gobernadores, alcaldes, hospitales públicos y privados y a las entidades de salud a vincularse a esta demanda.
- El Distrito fortaleció su red pública, con una inversión de $300 mil millones.
Medellín, mayo 29 de 2025- En defensa del derecho fundamental a la salud y ante la crítica situación que enfrenta el sistema en Colombia, el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez Zuluaga, interpondrá ante el Tribunal Administrativo de Antioquia una acción popular para que el Gobierno Nacional cumpla con sus obligaciones y garantice el acceso a la salud y la vida de los colombianos.
“Esta crisis se debe a las actuaciones de parte del Gobierno Nacional a través del Ministerio de Salud y la Superintendencia de Salud, así que los hago directamente responsables porque durante estos meses han intervenido EPS y no están pagando lo que corresponde a las IPS, que son las prestadoras de salud, tanto públicas como privadas. Hay entidades a las que solo le están cumpliendo con el 6 % de lo que corresponde a la factura de cada mes. Por ejemplo, el Hospital General, en abril facturó $18 mil millones por servicios prestados y tan solo le cancelaron $1.100 millones”, explicó Gutiérrez Zuluaga.
La Administración Distrital ha realizado una apuesta histórica para fortalecer su red pública de salud, compuesta por Metrosalud, el Hospital General de Medellín y el Hospital Infantil Concejo de Medellín. A la fecha, la ciudad consolida una inversión de $300 mil millones para mantenerla a flote.
La deuda total con el Hospital General es de $128 mil millones, Hospital Infantil Concejo de Medellín $9.200 millones y Metrosalud de $32 mil millones.
Adicionalmente, fortaleció el Centro Integrado de Gestión al Acceso (Ciga), una estrategia única en Colombia, creada durante la primera administración del alcalde Federico Gutiérrez, y puesta al servicio en instituciones públicas y privadas. En 2024 gestionó 217.409 citas médicas y en 2025 alcanza otras 91.585. La inversión en este esfuerzo es de $5.174 millones.
“La salud es un derecho y no una transacción, pero nuestra capacidad tiene límites y el Gobierno Nacional debe responder con urgencia a la solicitud que le estamos haciendo. Estamos sosteniendo a pulso nuestra red hospitalaria y defendiendo cada vida; no vamos a permitir que la gente muera haciendo fila mientras otros hacen política. Por eso es tan importante en este momento, de acuerdo a las conclusiones a las que hemos llegado con todas las instituciones de salud, tanto públicas como privadas, tomar la decisión de demandar al Gobierno”, anunció el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez Zuluaga.
A pesar de haberse promovido espacios de diálogo con el Ministerio Público, la Superintendencia Nacional de Salud, el Departamento y las EPS, y de contar con el Ciga para orientar adecuadamente a los pacientes en el acceso a los servicios de salud, es necesario adoptar medidas adicionales ante el progresivo deterioro de la capacidad y eficiencia del servicio de urgencias.
En este contexto, el Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (Crue) intervendrá en las referencias y contrarreferencias (coordinación de la atención en los diferentes centros asistenciales) que presenten demoras injustificadas. Por su parte, los prestadores de servicios deberán fortalecer las estrategias para liberar camas disponibles y mantener actualizados sus planes de emergencia hospitalaria para garantizar una respuesta oportuna a la crisis.
“Invito a los alcaldes, gobernadores, hospitales, no solo de Medellín y Antioquia, sino a las ligas de usuarios de proveedores de servicios, médicos, personal asistencial y a universidades de todo el país a que se vinculen a esta demanda. No tienen que presentar otra. Esta ya tiene el sustento legal y describe lo que está pasando con el sistema de salud. Que esto se vuelva una unidad de grupo de todos los colombianos en defensa de los usuarios del sistema”, instó el alcalde.
Y concluyó: “Porque detrás de cada factura está una persona, un niño, una mamá, un adulto mayor que necesita la atención. Nosotros como ciudad estamos haciendo nuestra parte, pero no nos vamos a quedar callados mientras otros se lavan las manos con el desastre que están generando”.