Haciendo uso de la protesta y movilización social, como herramienta legítima y derecho constitucional para reclamar el cumplimiento de los compromisos que el Estado ha firmado internacionalmente y ratificado a nivel interno en materia de Derechos Humanos, integrantes del Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente de Colombia, articulados a nivel nacional en el Congreso de los Pueblos, manifestaron que se unirán al Paro Nacional de este jueves 25 de abril de 2019.
Aseguran que lo harán para rechazar el asesinato de líderes, lideresas y defensores de Derechos Humanos, para protestar contra el Plan Nacional de Desarrollo, la agenda económica y social de Iván Duque, y contra la agudización de la guerra “contra nuestro pueblo y contra pueblos vecinos como lo evidencia el afán intervencionista sobre la hermana República Bolivariana de Venezuela”, señalan en un comunicado.
“Convocamos a nuestras bases sociales y a toda la población de la región, a participar activamente de las actividades que en cada uno de los territorios se han programado y organizado durante esta semana y de manera contundente el 25 de abril, en articulación con el llamado que a nivel nacional hace el movimiento social y de Derechos Humanos”, afirman en el comunicado.
Como se recordará, este 25 de abril, campesinos, indígenas, comunidades negras, sectores obreros, sindicales y estudiantiles se unirán al Paro Nacional con el que regiones y ciudades reclamarán para que se implementen políticas públicas que garanticen los derechos económicos, sociales y culturales de la población.
El último Paro Nacional se realizó en el año 2016 y finalizó con unos acuerdos concretos que, según las comunidades, aún no se han cumplido.
Este es el comunicado del Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente de Colombia:
“COMUNICADO A LA OPINIÓN PÚBLICA”
“Las condiciones de vida digna para las mayorías, cada vez son más reducidas, pues el Estado colombiano fiel a las tareas designadas por los imperios, afianza sus políticas en detrimento del bienestar del pueblo. No es gratis que su agenda legislativa y política vaya encaminada a legalizar el despojo de los territorios de pueblos indígenas, afros y campesinos; a garantizar el saqueo de los bienes de la naturaleza; a continuar la privatización de la Salud y la Educación; al desmonte de garantías laborales ganadas mediante luchas históricas de las y los obreros; a desconocer, recriminar y discriminar a las personas por su orientación y opción sexual; y a garantizar la impunidad frente a los crímenes de Estado; situación que se avizora empeorará con el Plan Nacional de Desarrollo”.
“Así mismo, la criminalización de la protesta social se agudiza, más de 600 dirigentes sociales y defensores de DDHH asesinados desde el 2016, al menos un centenar judicializados y otro tanto de amenazados, como consecuencia de su accionar social en defensa de la vida y los territorios”.
“Ante este panorama de represión y opresión, el pueblo organizado se ha movilizado históricamente para exigir al Estado unas mínimas garantías para la vida digna, sin embargo, la respuesta del régimen ha sido la estigmatización, la militarización, judicialización y la eliminación física a través de los homicidios sistemáticos, igualmente, los acuerdos pactados han sido reiteradamente incumplidos y menospreciados”.
“Esa misma situación es la que hoy nos lleva nuevamente a hacer uso de la protesta y movilización social, como herramienta legítima y derecho constitucional para reclamar el cumplimiento de los compromisos que el Estado ha firmado internacionalmente y ratificado a nivel interno en materia de Derechos Humanos”.
“En este sentido, como Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente de Colombia articulados a nivel nacional en el Congreso de los Pueblos, nos unimos al Paro Nacional para rechazar el asesinato de líderes, lideresas y defensores de Derechos Humanos, contra el Plan Nacional de Desarrollo, la agenda económica y social de Iván Duque, y la agudización de la guerra contra nuestro pueblo y contra pueblos vecinos como lo evidencia el afán intervencionista sobre la hermana República Bolivariana de Venezuela”.
“Convocamos a nuestras bases sociales y a toda la población de la región, a participar activamente de las actividades que en cada uno de los territorios se han programado y organizado durante esta semana y de manera contundente el 25 de abril, en articulación con el llamado que a nivel nacional hace el movimiento social y de Derechos Humanos”.
“Al Estado colombiano le exigimos el respeto por las comunidades que se vinculan a esta jornada nacional y a abstenerse de adelantar acciones de represión contra las mismas”.
“A la comunidad en general, estar atentos a los medios alternativos de comunicación, a través de los cuales estaremos informando las dinámicas en las que se desarrolla la jornada”.