Caracas, 16 octubre de 2021.- El diálogo del Gobierno y la oposición de Venezuela es la primera víctima de la extradición a EEUU del empresario colombiano Álex Saab, supuesto testaferro del presidente Nicolás Maduro, después de que el oficialismo interrumpiera su participación en esas conversaciones como una forma de protesta.
El empresario colombiano, quien recientemente fue incluido como miembro de la delegación del Gobierno en la mesa de negociación, fue extraditado hoy después de más de un año detenido en Cabo Verde y tras ser solicitado por EEUU por un caso de lavado de dinero.
(En contexto: Cabo Verde extradita a EE.UU. al empresario Álex Saab)
Caracas, que rechaza estas acusaciones contra Saab, anunció entonces que la delegación gubernamental no asistirá a la cuarta ronda de negociación pautada para el domingo 17 de octubre, después de asistir a tres reuniones anteriormente desde que se iniciaran los encuentros el pasado 13 de agosto.
¿SUSPENSIÓN DEFINITIVA?
Sin embargo, el jefe de la delegación oficialista para el diálogo, Jorge Rodríguez, quien habló de «suspensión», no dejó claro si el diálogo político llegó a su final o podrá retomarse en un futuro.
«Nuestra delegación anuncia que suspende su participación en la mesa de negociación y diálogo; en consecuencia no asistiremos a la ronda que debía iniciarse el día de mañana (…) en Ciudad de México como expresión profunda de nuestra protesta frente a la brutal agresión contra la persona y la investidura de nuestro delegado Álex Saab», dijo el también presidente del Parlamento.
Rodríguez, quien presumió del «gran éxito» del oficialismo en el diálogo a la salida de la tercera ronda celebrada hace tres semanas, había señalado, anteriormente, al presidente colombiano, Iván Duque, y a una parte de la oposición de querer boicotear las negociaciones y acabar con una opción de paz para Venezuela.
Además, aseguró que la extradición de Saab, acusado por EEUU de lucrarse con «cientos de millones de dólares», se trata de una nueva agresión contra el país, y exigió a la Justicia estadounidense su puesta en libertad, sin precisar si con ello se retomaría el diálogo.
«Esta acción ilegal e inhumana, lesiva del derecho internacional constituye un nuevo acto de agresión por parte de Estados Unidos contra la república bolivariana de Venezuela, dado que Álex Saab ha sido incorporado por nuestro país como miembro pleno al proceso de diálogo y negociación que se lleva a cabo en México», sostuvo.
EL GOBIERNO Y EL DEDO ACUSADOR
El Gobierno, además de tomar la drástica decisión de suspender el diálogo, tiró balones fuera y señaló, como principales culpables del proceso «injusto» contra Saab, a EEUU y a Cabo Verde, países que, «en complicidad», lo mantuvieron preso 491 días «sin orden de captura ni debido proceso», agregó.
Según el Ejecutivo, Cabo Verde cometió una «grave violación de los derechos humanos» del colombiano, quien -recordó- está «investido como diplomático y representante de nuestro país ante el mundo».
La referida investidura se produjo, por orden de Maduro, cuando Saab llevaba ya seis meses detenido en Cabo Verde, con el objetivo, según expertos internacionalistas, de evadir la justicia bajo la excusa de la inmunidad diplomática que ampara a quienes, de manera oficial, se dedican a la política exterior en representación de sus países de origen.
Si bien Saab no es venezolano de nacimiento, Maduro aseguró, en reiteradas ocasiones, que tiene doble nacionalidad y que, por tanto, cuenta con todas las credenciales para representar al país caribeño.
LA OPOSICIÓN CELEBRA
En el lado opuesto, la oposición, que había solicitado reiteradamente la extradición del empresario, celebró que se hiciera efectiva, algo que -aseguró- sucedería «tarde o temprano».
El líder opositor Juan Guaidó aplaudió el sistema de Justicia de Cabo Verde y rechazó que el Gobierno respondiera a la extradición de Saab con la interrupción del diálogo.
Guaidó tachó de irresponsable la decisión del Gobierno y lo acusó de evadir la «atención urgente al país».
Asimismo, el representante de Guaidó en EEUU, Carlos Vecchio, y los exdiputados Julio Borges y Delsa Solórzano, también celebraron la extradición de Saab y coincidieron en que «la justicia siempre llega».
«No hay intocables. Tarde o temprano todos los que han saqueado a Venezuela y cometido delitos de lesa humanidad van a caer. La justicia siempre llega. Luego de un proceso largo y complejo es extraditado a EEUU Álex Saab, el mafioso mayor de Maduro, Cilia Flores y su entorno», dijo el opositor Carlos Vecchio en su cuenta de Twitter.
Por su parte, Borges indicó que «la extradición de Álex Saab a EEUU es un paso fundamental que conduce a la justicia y a la verdad ante lo que ha sido el saqueo, la corrupción y la red de crimen organizado que hoy sostiene y alimenta al régimen de Maduro».
Asimismo, Solórzano, quien aplaudió la decisión de Cabo Verde, subrayó que la «justicia siempre llega».
EFE