Naciones Unidas, 28 de enero de 2022 – El Enviado Especial de la ONU para el oeste de África y el Sahel, Mahamat Saleh Annadif, viajará este fin de semana en una «misión de buenos oficios» ante las autoridades de ese país, que el pasado 25 de enero derrocaron al Gobierno legítimo en un golpe de estado condenado por la comunidad internacional.
En rueda de prensa, un portavoz de la ONU, Farhan Haq, no dio detalles sobre el programa de Annadif en Uagadugu, y solo precisó que durante ese viaje se reunirá con una misión enviada a la capital burkinesa por la CEDEAO, la comunidad regional de estados de África del Oeste a la que pertenece Burkina y cuya membresía acaba de ser suspendida hoy.
Annadif se reunió hoy virtualmente con representantes de la CEDEAO a los que reiteró su condena por los cambios anticonstitucionales y exigió un regreso a la legalidad en el país, lo mismo que ha dicho el secretario general, António Guterres.
Por el momento, la CEDEAO no ha impuesto sanciones específicas sobre Burkina, más allá de su suspensión del organismo, pero podría hacerlo más adelante, tal como hizo con otros regímenes golpistas como el de Mali y el de Guinea Conakry, sometidos a un embargo comercial.
Ayer, el líder de los golpistas burkineses, el teniente coronel Paul Henri Sandaogo Damiba, advirtió que la «normalidad constitucional» volverá únicamente cuando se den las condiciones que marque el pueblo burkinés.
«Comprendo las legítimas dudas que suscita esta ruptura en el funcionamiento normal del Estado, pero quiero asegurar a todos los amigos de Burkina Faso de que el país seguirá respetando sus compromisos internacionales, especialmente en lo que se refiere al respeto de los derechos humanos», agregó el teniente coronel.
EFE
