Asunción, 29 diciembre.- El Gobierno mostró este martes una serie de documentos como evidencias de que el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) emplea en sus filas a menores: hijos de sus integrantes, crecidos y educados en Argentina y luego devueltos a los campamentos de la guerrilla donde nacieron.
«Se confirman nacimientos de menores en campamentos, posteriormente trasladados a Argentina para crecer y posteriormente volver a ingresar a Paraguay y al monte y utilizarlos (a los menores) como combatientes», dijo a los medios el fiscal Federico Delfino.
LAS MENORES ARGENTINAS FALLECIDAS
Ese esquema, presentado por altas autoridades del país, entre ellas el canciller, Federico González, incluye a las dos niñas que murieron el 2 de septiembre en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad en uno de esos campamentos.
Las niñas tenían nacionalidad argentina según la documentación enviada entonces por el Gobierno de ese país al paraguayo.
Sin embargo, González dijo que las pruebas presentadas muestran que son «documentos auténticos de contenido falso», y añadió que todas las evidencias serán enviadas a las principales agencias internacionales de Derechos Humanos.
De acuerdo con esos materiales, una de las niñas era hija de Osvaldo Villalba, considerado el actual jefe del EPP, y la otra de Liliana Villalba, hermana de este y también miembro del grupo armado.
Las niñas se habrían criado en la provincia argentina de Misiones con María Ayala, la madre de los dos guerrilleros, afincada en ese país.
Al respecto, las autoridades señalaron Laura Villalba, hermana de Osvaldo y Liliana, como una de las encargadas de llevar a cabo los traslados a Argentina y de gestionar la identidad de las menores con ella como madre.
Laura Villalba fue arrestada la pasada semana en la zona norte del país donde opera el EPP, en posesión de una granada y un arma corta.
En cuanto al operativo en el que murieron las niñas, el general Héctor Grau presentó una lista incautada en ese lugar en la que se detalla el reparto de las guardias de vigilancia del campamento de ese día, en el que figura el nombre de una de las menores muertas.
«Esta prueba y muchas otras demuestran las falsas acusaciones contra el Estado paraguayo (..) Es el EPP el que secuestra y asesina, no el Estado paraguayo», dijo González en el acto, en la sede del Ministerio Público.
ENTREGA DE LOS MENORES
El fiscal Delfino admitió que no disponen de las cifras de los menores que estarían con el EPP.
Al respecto, el general Grau dijo que los militares lanzarán octavillas en las zonas de bosque donde se opera el EPP instando a que entreguen a los menores y garantizando su seguridad.
No obstante, Grau señaló que continuarán las operaciones militares contra el EPP, que hace tres meses secuestró al expresidente del país Oscar Denis.
«Se lanzarán panfletos para evitar que en cualquier otro enfrentamiento caigan menores. Ellos son las víctimas de sus propios padres», dijo Grau.
El militar había mostrado un video en el que Osvaldo Villalba justifica esa presencia de menores diciendo a cámara que «su misión es luchar por su pueblo, para eso nacieron».
Los documentos son una parte de los obtenidos durante el allanamiento en el campamento que siguió a la muerte de las dos menores, en donde se encontró una gran cantidad de armas, pertrechos y material informáticos.
ÓSCAR DENIS
El EPP secuestró, días después de esas muertes, a Óscar Denis, vicepresidente del país entre 2012 y 2013, después de que saliera en coche de su estancia ganadera, entre los departamentos de Concepción y de Amambay.
La familia de Denis aseguró a la semana siguiente que cumplió la exigencia del EPP para liberar a Denis: el reparto de víveres por valor de dos millones de dólares entre 40 asentamientos campesinos. La detenida Laura Villalba declaró a los fiscales que uno de los imputados por ese secuestro, luego muerto en un enfrentamiento militar, le dijo antes de morir que la familia de Denis no había cumplido esas condiciones.
El Gobierno atribuye al EPP, fundado en 2008, unos 80 asesinatos, además de secuestros y ataques a estancias agropecuarias.
El EPP, de orientación marxista y que dice actuar en nombre del campesinado pobre, tendría en la actualidad unas dos docenas de miembros, según las autoridades.