El jefe de los cascos azules reitera los llamados de la ONU a un alto el fuego en Líbano

38
- Cascos azules españoles desplegados en Líbano comenzaron hoy a levantar una alambrada de espino en el sur de Líbano para cerrar un paso de trescientos metros entre Líbano e Israel utilizado por contrabandistas. En la foto, dos soldados españoles observan los trabajos que realizan decenas de militares españoles apoyados por máquinas excavadoras y en presencia de soldados libaneses y algunos cascos azules franceses, para colocar la valla en el límite de la localidad meridional de Ghayar, ocupada por Israel desde la guerra del verano de 2006. EFE/Ronith Daher

Beirut, 14 de noviembre de 2024.- El jefe del departamento de Operaciones de Paz de Naciones Unidas, Jean-Pierre Lacroix, reiteró este jueves los llamados de la ONU para que se implemente un alto el fuego en el Líbano, donde el responsable ha realizado una visita de tres días en medio de los enfrentamientos entre Israel y Hizbulá.

«Reitero el llamamiento de las Naciones Unidas a que cesen las hostilidades», dijo Lacroix al término de su viaje, según un comunicado difundido por la misión de mantenimiento de paz de la ONU en el sur del Líbano (FINUL).

Asimismo, el jefe de los cascos azules añadió que la ONU «apoya los esfuerzos diplomáticos encaminados a ese objetivo y a la plena aplicación de la resolución 1701» del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que en 2006 puso fin a la guerra librada entre Hizbulá e Israel.

Esa resolución «sigue siendo el marco para volver a la estabilidad», según Lacroix, que en los últimos días se reunió con el primer ministro libanés, Najib Mikati, el presidente del Parlamento, Nabih Berri y el comandante del Ejército del Líbano, Joseph Aoun, entre otros altos cargos del país mediterráneo.

En esos encuentros subrayó «la necesidad de que tanto el Líbano como Israel se comprometan a cumplir plenamente sus obligaciones en virtud de la resolución» y recordó que los efectivos de la FINUL «siguen haciendo todo lo posible para cumplir con las tareas que se les han encomendado, en condiciones muy difíciles y desafiantes».

«Al hacerlo, están ayudando a crear y mantener el espacio para que surja una solución política y diplomática», dijo Lacroix, que visitó el cuartel general de la FINUL en Naqoura y una posición en Mansouri, en el sur del Líbano, para reunirse con los cascos azules destacados ahí.

Desde que Israel inició su invasión en el sur del Líbano en la madrugada del 1 de octubre, las autoridades de Israel han apelado en varias ocasiones a la FINUL a abandonar la zona, algo a lo que esta misión de Naciones Unidas se ha negado pese a los múltiples ataques del Ejército israelí contra sus posiciones.

EFE