Nueva York, 9 octubre.- El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este viernes con un descenso del 0,19 %, hasta 41,11 dólares el barril, ante el aumento de infecciones de COVID-19 en todo el mundo y la perspectiva de que se restablezca pronto la producción noruega.
A las 09.05 hora local (13.05 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en noviembre restaban 0,08 dólares respecto a la sesión previa del jueves.
El precio del crudo de referencia estadounidense reaccionaba al incremento récord de casos de coronavirus a nivel global divulgado por la Organización Mundial de la Salud ayer jueves, casi 340.000 infecciones, en buena parte encabezadas por países europeos.
«Europa ha sido clave en este incremento y las restricciones locales son un factor bajista en la demanda de crudo», dijo en una nota el jefe de mercados petroleros de la firma Rystad Energy, Bjornar Tonhaugen.
El barril de Texas cerrará la semana con ganancias, no obstante, debido a los movimientos «artificiales» que están provocando la temporada de huracanes en el Golfo de México y la reducción de suministro en Noruega, explicó el experto.
Se espera que este viernes el huracán Delta, con categoría 3, toque tierra en la costa del estado de Luisiana, por lo que las productoras de la zona llevan días cerrando y evacuando sus instalaciones.
El Gobierno de EE.UU. estima que más del 91 % de la producción de petróleo en el Golfo de México ha quedado interrumpida, y casi el 62 % de la de gas natural.
Por otra parte, los analistas señalan que la huelga de trabajadores en Noruega podría resolverse pronto, lo que presiona a la baja el precio porque se restablecería la producción en un momento en el que la demanda de crudo no está aumentando.
«Creemos que pronto habrá una corrección cuando la huelga noruega se resuelva y el huracán se vaya de EE.UU. Es así como funciona el mercado y estos niveles superiores a 40 dólares son frágiles como el cristal», apuntó Tonhaugen.
EFE