La Paz, 24 mayo.- El presidente de Bolivia, Luis Arce, recibió este lunes la primera dosis de la rusa Sputnik V como señal para que la población también se vacune contra la covid-19, mientras el país atraviesa por la tercera ola de contagios de la pandemia.
«Nosotros pretendíamos ser los últimos en vacunarnos. Esta es una señal para la población, para que acuda a los centros de vacunación», manifestó el jefe de Estado en un breve contacto con los medios tras asistir al Hospital del Sur en El Alto, la segunda ciudad más poblada del país y vecina de La Paz.
Arce, de 57 años, se sometió al procedimiento que consistió en la espera de su turno de atención, el paso al área de valoración de sus signos vitales, el de registro de vacunación para recién ingresar a una sala de inmunización en la que se le aplicó la primera dosis.
Luego, el mandatario permaneció por algunos minutos en observación para valorar si tuvo algún tipo de reacción a la vacuna Sputnik V, que es la que se aplica en ese centro médico.
«Hay que hacer énfasis y la población tiene que entender que tenemos que ir a hacernos vacunar, aquí está el ejemplo», remarcó Arce.
El presidente destacó los logros de la campaña de vacunación masiva para la que la anterior semana se habilitaron puestos móviles y atención durante el fin de semana para avanzar en la inmunización de la población de Bolivia.
Arce señaló que con esta labor han ascendido a más de 52.000 las dosis aplicadas por jornada cuando inicialmente, esta tarea que estaba a cargo de gobernaciones y municipios, reportaba únicamente entre 6.000 y 8.000 al día.
El proceso de vacunación comenzó a finales de enero en varias fases empezando por el personal médico de primera línea, luego a enfermos crónicos y actualmente a mayores de 50 años y personal de los medios de comunicación del país.
Un acuerdo en la víspera entre el Ministerio de Salud y los representantes de los maestros rurales y urbanos, que son unos 167.950 en el país, determinó que todos los docentes del sector público sean tomados en cuenta en la vacunación por la cantidad de casos reportados y decesos en ese sector.
Bolivia ha aplicado 1.076.124 primeras dosis y 300.370 de la segunda, según el último reporte del ministerio, entre una población que supera los 11 millones de habitantes.
Desde principios de mayo el país atraviesa la tercera ola de contagios en la que se ha llegado a reportar jornadas con más de 3.000 casos, la cifra más alta durante la pandemia.
Desde la identificación de los primeros contagios en marzo del año pasado, se han registrado 13.965 decesos y 349.653 casos confirmados de los que 53.678 permanecen activos.